¿A partir de qué fecha y qué acontecimiento nació la iglesia, o comenzó a funcionar?

La palabra iglesia, es la traducción de la palabra griega EKKLESIA, la cual significa literalmente: Los que han sido llamados afuera. Esta palabra se utilizaba en relación con una asamblea o congregación que podía ser llamada afuera con varios propósitos. El significado de la palabra ekklesia en el Nuevo Testamento es doble. Se refiere a aquellos que son llamados afuera por Dios de entre las naciones del mundo para formar un pueblo para su nombre, los cuales constituyen la iglesia o el cuerpo de Cristo. Esto se conoce como la iglesia universal. En este sentido, la iglesia es un organismo. Pero la palabra ekklesia en el Nuevo Testamento también se refiere a aquellos que son llamados afuera de alguna comunidad, para reunirse en el nombre de Cristo y para poner en práctica los principios y preceptos de Cristo, los cuales se encuentran en el Nuevo Testamento. Esto se conoce con el nombre de iglesia local. En este sentido, la iglesia es una organización. Al mirar a la iglesia universal como un organismo viviente, ésta es el cuerpo de Cristo, del cual Cristo es la cabeza viviente y los creyentes en Cristo son los miembros del cuerpo. Así es como se presenta a la iglesia universal en pasajes bíblicos como 1 Corintios 12:12-13 donde dice: “Porque así como el cuerpo es uno, y tiene muchos miembros, pero todos los miembros del cuerpo, siendo muchos, son un solo cuerpo, así también Cristo. Porque por un solo Espíritu fuimos todos bautizados en un cuerpo, sean judíos o griegos, sean esclavos o libres; y a todos se nos dio a beber de un mismo Espíritu.” Vista la iglesia de este modo, como un organismo vivo, la iglesia es el conjunto de todos aquellos que han depositado su fe en la persona y obra de Cristo Jesús, quien murió por ellos en la cruz del Calvario. Estos creyentes están esparcidos en todo el mundo. Algunos han muerto, otros están vivos, pero todos forma parte de la iglesia. En este cuerpo de creyentes llamado iglesia, no hay distinción racial ni social ni de género, ni de ninguna otra índole. Gálatas 3:28 dice: “Ya no hay judío ni griego; no hay esclavo ni libre; no hay varón ni mujer; porque todos vosotros sois uno en Cristo Jesús.” Ahora que tenemos una clara idea de lo que es la iglesia, viene la gran pregunta: ¿Cuándo comenzó? ¿Cuándo nació este organismo viviente? Para determinar esto es necesario hacer algunas consideraciones. Primero, no podría haber iglesia en el mundo hasta que Cristo muriera, porque es la preciosa sangre de Cristo que fue derramada en la cruz, la que lava a cada miembro de la iglesia de su pecado. Sin muerte de Cristo no se puede hablar de iglesia de Cristo. Segundo, no podría haber iglesia en el mundo hasta que Cristo resucitara de entre los muertos, porque a la iglesia se le ha prometido resurrección, promesa real y verídica sustentada en la resurrección irrefutable de Cristo. Tercero, no podría haber iglesia hasta que Cristo hubiera ascendido a la gloria de su Padre para poder ser la cabeza de la iglesia, porque la iglesia es una nueva creación con Cristo resucitado como la cabeza de la cual proviene todo impulso de vida. Cuarto, no podría haber iglesia en la tierra hasta el advenimiento del Espíritu Santo, porque una de las realidades más básicas y fundamentales respecto de la iglesia es que ella es el templo de Dios por medio del Espíritu. La iglesia es regenerada, bautizada y sellada por el Espíritu. Muy bien, tratemos ahora de identificar un instante en el tiempo cuando se hayan cumplido estos cuatro requisitos. El instante cuando esto sucedió es en el día que se celebraba la fiesta judía llamada Pentecostés. Para entonces, Jesús había muerto, cumpliendo la primera condición, había resucitado, cumpliendo la segunda condición, había sido ascendido a la gloria de su Padre cumpliendo la tercer condición. Solo faltaba la venida del Espíritu Santo. Leamos por tanto lo que sucedió en algún momento de ese día. Se encuentra en Hechos 2: 1-4 donde dice: “Cuando llegó el día de Pentecostés, estaban todos unánimes juntos. Y de repente vino del cielo un estruendo como de un viento recio que soplaba, el cual llenó toda la casa donde estaban sentados; y se les aparecieron lenguas repartidas, como de fuego, asentándose sobre cada uno de ellos. Y fuero todos llenos del Espíritu Santo, y comenzaron a hablar en otras lenguas, según el Espíritu les daba que hablasen” El Espíritu Santo había venido sobre los creyentes, en cumplimiento de las promesas de Cristo. Se había cumplido la cuarta condición. Había por tanto nacido la iglesia. De modo que, amable oyente, la iglesia de Cristo nació como organismo viviente el día de Pentecostés del año que Cristo murió, resucitó y fue ascendido a la gloria de su Padre.