Autor: cris

  • La pregunta para el programa de hoy es la siguiente: ¿Qué debemos entender concretamente cuando la Biblia habla de la blasfemia contra el Espíritu Santo en Lucas 12:10?

    Leamos el texto que se encuentra en Lucas 12:10. Dice así: “A todo aquel que dijere alguna palabra contra el Hijo del Hombre, le será perdonado; pero al que blasfemare contra el Espíritu Santo, no le será perdonado.”

    Estas palabras fueron dichas por el Señor Jesús. Para entender el significado de ellas, es necesario examinar con detenimiento las circunstancias en las cuales fueron pronunciadas. Para eso es necesario recurrir al Evangelio según Mateo capítulo 12.

    Allí, a partir del versículo 22 notaremos que fue traído a Jesús un endemoniado, ciego y mudo. El Señor Jesús le sanó de tal manera que el ciego y mudo veía y hablaba. Al mirar tan singular milagro, mucha gente estaba atónita y se preguntaba: ¿Será éste aquel Hijo de David? En otras palabras, esta gente vio en el Señor Jesús indicios que apuntaban a que él era el Cristo, el Mesías, el Hijo de David, pero no estaban totalmente seguros.

    Pero entre la multitud había otros que ni siquiera dieron a al Señor Jesús el beneficio de la duda. A pesar de haber visto con sus propios ojos que el Señor Jesús tenía todas las evidencias que demostraban que él era el Mesías, el Cristo, voluntariamente ignoraron esas evidencias y llegaron a la conclusión que el Señor Jesús echaba fuera demonios por el poder de Beelzebú, príncipe de los demonios.

    En otras palabras, atribuyeron a Satanás el poder que el Señor Jesús tenía para hacer milagros.

    Conociendo el pensamiento de estas personas, el Señor Jesús les amonestó severamente en cuanto a lo absurdo de pensar que echaba fuera demonios por el poder de Satanás. Luego afirmó que es por el poder del Espíritu Santo que echaba fuera demonios. Fue el Espíritu Santo quien dio poder al Señor Jesús para que realice todos los milagros que hizo. De esta manera el Espíritu Santo se constituyó en el principal testigo de que el Señor Jesús es el Mesías, el Cristo.

    Fue en estas circunstancias cuando el Señor Jesús pronunció las palabras que leímos en Lucas 12:10.

    Si una persona, habiendo visto personalmente al Señor Jesús y habiendo estado plenamente consciente que el Señor Jesús es el Cristo, y habiendo voluntariamente rechazado que el Señor Jesús es el Cristo, ha blasfemado contra el Espíritu Santo, porque es el Espíritu Santo quien en último término testifica que el Señor Jesús es el Cristo.

    Este fue el caso de los fariseos que habiendo estado con el Señor Jesús y habiendo visto su poder sin igual, sin embargo, atribuyeron a Satanás las obras que hacía. De esta manera, voluntariamente rechazaron al Señor Jesús como el Cristo, como el Mesías y al hacerlo blasfemaron contra el Espíritu Santo, pecado que, según las palabras del Señor Jesús, jamás les será perdonado.

    En conclusión, la blasfemia contra el Espíritu Santo es el pecado que cometieron algunos fariseos, quienes a pesar de estar con Jesús y ver con sus propios ojos el poder del Espíritu Santo actuando en él, lo cual era la demostración que él es el Cristo, el Mesías de Israel, sin embargo, voluntariamente atribuyeron a Satanás el poder que actuaba en el Señor Jesús y de esa manera negaron que el Señor Jesús es el Cristo, el Mesías de Israel. Este pecado no les fue perdonado y por tanto al morir físicamente en estas condiciones, recibieron castigo eterno.

  • ¿Es posible que  yo pueda perder mi salvación?

    La palabra de Dios enseña que una vez salvos, somos para siempre salvos. Existe mucha evidencia bíblica que demuestra este hecho. De entre esa mucha evidencia, permítame citar solamente tres pasajes bíblicos.El primero, Juan 10:27-29 dice: «Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen, y yo les doy vida eterna; y no perecerán jamás, ni nadie las arrebatará de mi mano. Mi padre que me las dio, es mayor que todos, y nadie las puede arrebatar de la mano de mi padre.»Si ha recibido a Cristo como su Salvador personal, ha llegado a ser un hijo de Dios y también una oveja de Cristo. Imagine cuánto le ama su pastor que estuvo dispuesto a morir en su lugar. Como oveja del rebaño de Cristo, entra a disfrutar de algunos beneficios.

    Este texto cita al menos lo siguiente: Es conocido por Cristo. Siendo ese el caso, nada ni nadie puede hacer algo en su contra sin el consentimiento de su pastor. Además, dice el texto que el pastor le da vida eterna. No dice que le dará vida eterna si no peca o si se mantiene fiel hasta el final. Por eso dice el mismo texto que las ovejas del pastor que es Cristo no perecerán jamás. Esto sería suficiente garantía para sentirnos seguros de nuestra salvación, pero el pastor va más allá en su afán para que esté seguro de su salvación eterna. El texto dice que las ovejas del pastor están en su mano y por tanto, no existe nadie que pueda arrebatarlas de allí en contra de la voluntad del pastor. Y más aún, además de estar en la mano de Cristo, las ovejas estamos también en la mano del Padre. Cristo y el Padre nos sostienen en su mano. Por eso nuestra salvación está garantizada por la eternidad.Veamos ahora un segundo texto. Hebreos 10:14 dice: «porque con una sola ofrenda hizo perfectos para siempre a los santificados.»Los santificados de quienes habla este texto, somos todos aquellos que hemos recibido a Cristo como nuestro Salvador. Esta santificación no fue por mérito propio sino porque confiamos en Cristo como nuestro Salvador quien se ofreció a sí mismo por nosotros. Pero note la excelencia de ese sacrificio de Cristo. El texto leído dice que la ofrenda de sí mismo hizo perfectos para siempre a los que hemos creído en él. Perfectos para siempre es otra forma de decir: salvos por la eternidad. De modo que, si ha confiado en Cristo como su Salvador, ha sido hecho perfecto para siempre.

    No existe la más mínima posibilidad de perder su salvación.Por último, consideremos un tercer texto. Romanos 8:37-39 dice: «Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó. Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente ni lo por venir, ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios que es en Cristo Jesús Señor nuestro.»Casi nada se puede añadir a la contundencia en favor de la seguridad de la salvación de este pasaje bíblico. Si ha recibido a Cristo como Salvador, nada ni nadie, ni Satanás, ni sus demonios, ni siquiera Usted mismo puede hacer que se separe del amor de Dios. La salvación es eterna.

  • Qué elementos se debe tomar en cuenta para una verdadera adoración pública a Dios?

    La adoración pública a Dios solamente tiene sentido cuando se sustenta en una adoración privada a Dios.Así fue como lo entendió David. Note su testimonio personal sobre su adoración privada. Salmo 69:30 dice: “Alabaré yo el nombre de Dios con cántico, lo exaltaré con alabanza”Esta adoración privada dispuso el corazón de David para una adoración pública sincera. Salmo 66:16-17 dice: “Venid, oíd todos los que teméis a Dios, y contaré lo que ha hecho a mi alma. A él clamé con mi boca, y fue exaltado con mi lengua”

    David está adorando en público. Lo hizo con un corazón previamente preparado en la adoración en privado. La vitalidad y frescura de la adoración pública depende en gran parte de la vitalidad y frescura de la adoración privada. Si no estamos invirtiendo tiempo diariamente en la adoración a Dios, no somos aptos para participar en la adoración pública a Dios. ¿Cómo podemos pensar que adoramos a un Dios de quien nos acordamos solo el domingo en la mañana y nos olvidamos de él el resto de la semana?Por esta razón, el elemento indispensable para una buena adoración pública no es la forma de adoración sino la condición del corazón de los adoradores. Si la adoración en público no es la expresión de nuestra vida privada de adoración, estamos siendo hipócritas. La adoración debe ser en espíritu y en verdad. Observe lo que Jesús dijo a la mujer junto al pozo, según Juan 4:24: “Dios es Espíritu; y los que le adoran, en espíritu y en verdad es necesario que adoren”Adorar en espíritu significa poner el corazón en la adoración. En contraste con la mera ejecución de acciones externas aprendidas o imitadas de otros.

    Es imposible ser un adorador en verdad si no conocemos lo que dice la palabra de Dios. La adoración tanto privada como pública debe ser en el nombre de Cristo, porque sólo por su sangre derramada en la cruz del calvario podemos tener acceso con confianza al trono de Dios para adorar y hallar gracia y misericordia para el oportuno socorro.La adoración también requiere corazones que no atesoren el pecado. David decía en cuanto a esto, según Salmo 66:18 “Si en mi corazón hubiese yo mirado a la iniquidad, el Señor no me habría escuchado.”Atesorar el pecado se refiere a la actitud de mantener un pensamiento o una conducta que sabemos que es contraria a lo que enseña la palabra de Dios.Una buena práctica antes de la adoración privada o pública es examinar el corazón para ver si allí hay algo que ofenda a Dios y sea necesario arreglarlo. No olvide que los pecados que se cometen en secreto o se guardan en secreto son un escándalo público en cielo.Para adorar a Dios también se necesita de humildad. La humildad es una virtud muy esquiva. Cuando pensamos que ya la teníamos es justo cuando acabamos de perderla.

    La humildad se manifiesta en un corazón totalmente sometido a la voluntad de Dios y es requisito indispensable para adorar a Dios.De manera que antes de adorar es bueno hacernos un examen de conciencia. ¿Me he presentado yo mismo a Dios como un sacrificio vivo y santo? Solo así estaré viviendo un estilo de vida de adoración y estaré en capacidad de adorar a Dios en privado y en público.

  • ¿Cuál es la interpretación de la parábola del rico y el mayordomo infiel, que se encuentra en Lucas 16:1-13?

    En esta parábola, el Señor Jesús habla a sus discípulos acerca de la mayordomía. El hombre rico de la parábola representa a Dios. El mayordomo representa a cada uno de nosotros los creyentes. Un mayordomo es alguien a quien se le encarga la administración de los bienes de otro. El mayordomo de la parábola fue acusado de ser disipador de los bienes de su amo. En otras palabras, los bienes del amo estaban desapareciendo en las manos de este mayordomo infiel. El amo por tanto llamó a cuentas a su mayordomo y como la acusación quedó demostrada, lo despidió. Esto hizo que el mayordomo infiel se ponga a pensar en cómo iba a enfrentar su futuro. Probablemente estaba muy viejo o era muy ocioso para trabajar y de hecho era muy orgulloso como para mendigar. ¿Qué podía hacer para no morirse de hambre una vez que deje su responsabilidad como mayordomo?

    Fue en estas circunstacnias cuando entró a funcionar la sagacidad de este mayordomo infiel. Se ideó un plan para que cuando esté en necesidad tenga amigos que le ayuden. Su plan fue ir a los deudores de su amo para que paguen menos de lo que en realidad debían. De esta manera, los deudores salían ganando, una ganancia mal habida por supuesto, y hacían del mayordomo infiel su héroe. Los deudores quedaban en deuda con el mayordomo infiel. Lo que el mayordomo infiel hizo no fue porque tenía buen corazón, sino porque quería que los deudores del amo le paguen el favor cuando esté en necesidad. La parte sorprendente de la historia viene cuando el amo alaba al mayordomo infiel, no por haberle robado sus bienes, sino por la sagacidad con la que actuó para garantizar su futuro. La alabanza no es por la corrupción o la deshonestidad del mayordomo infiel sino por el ingenio o la sagacidad con que actuó para asegurar su futuro en la tierra.

    Debemos tomar muy en cuenta esto en nuestras propias vidas, reconociendo por supuesto que nuestro futuro como creyentes no está en este mundo sino en el cielo. Así como el mayordomo infiel mostró sagacidad para asegurarse de tener amigos en el futuro aquí en la tierra, nosotros como creyentes, debemos también mostrar sagacidad para usar los bienes de nuestro Señor de tal forma que muchos puedan morar junto a nosotros en el cielo por la eternidad. Este es el pensamiento central de la parábola. Jesús no está alabando la deshonestidad del mayordomo infiel sino la sagacidad para usar lo que tenía a la mano para asegurar su futuro en este mundo. Jesús lo dijo claro, los incrédulos son más sagaces para asegurar su futuro en este mundo que los creyentes para acumular riqueza en el cielo. Nosotros los creyentes debemos ganar amigos que nos acompañen en el cielo por medio del uso sagaz de lo que Jesús llamó riqueza injusta.

    Esto no se refiere a riqueza mal habida, sino a la riqueza en general, la cual sirve solamente mientras estamos en la tierra. Cuando salgamos de este mundo, nuestra riqueza no nos servirá de nada, por eso es injusta. En otras palabras, nosotros los creyentes debemos usar el dinero y cualquier otro bien material para ganar almas para Cristo, almas que compartirán con nosotros por la eternidad en las moradas celestiales.

  • ¿La mujer debe andar cubierta de pies a cabeza y es impura durante su periodo menstrual?

    En la Biblia dice que la mujer debe andar cubierta de pies a cabeza. Y no me consta, pero me han dicho también que según la Biblia la mujer es impura durante su periodo menstrual. ¿Qué hay de aquello? Algunos no creyentes hacen alusión a cosas como estas para afirmar que la Biblia no puede ser nuestro manual para la vida, como sostenemos los creyentes, porque es anticuada o caduca.

    Gracias por su pregunta. Hasta donde yo conozco la Biblia, ni en el Antiguo Testamento, ni en el Nuevo Testamento aparece alguna enseñanza en cuanto a que la mujer debe andar cubierta de pies a cabeza. La Biblia habla de la vestimenta de la mujer, pero de ningún modo en los términos expresados en su pregunta. Note por ejemplo lo que dice 1 Timoteo 2:9-10. Asimismo que las mujeres se atavíen de ropa decorosa,  con pudor y modestia;  no con peinado ostentoso,  ni oro,  ni perlas,  ni vestidos costosos,  sino con buenas obras,  como corresponde a mujeres que profesan piedad.Según este texto, la mujer debe vestirse con ropa decorosa, vestirse con pudor y vestirse con modestia, y no debe gastar una fortuna en adornos para realzar su imagen.

    Esto es lo que dice la Biblia en cuanto a la vestimenta de la mujer. De ninguna manera esto es equivalente a cubrirse de pies a cabeza al estilo de lo que hacen algunas mujeres en los países donde predomina el islamismo radical. La vestimenta de la mujer debe reflejar la integridad de su carácter. Debe ser una vestimenta sobria, una vestimenta que no sea fuente de tentación para los varones, una vestimenta modesta en su costo. La mejor vestimenta para una mujer creyente son sus buenas obras. Por otro lado, efectivamente la ley de Moisés establecía que una mujer es impura durante su ciclo menstrual. Note lo que dice Levítico 15:19 Cuando la mujer tuviere flujo de sangre,  y su flujo fuere en su cuerpo,  siete días estará apartada;  y cualquiera que la tocare será inmundo hasta la noche.

    Según la ley de Moisés, durante su periodo menstrual la mujer era inmunda. Esto simplemente significa que durante su periodo menstrual las mujeres no estaban calificadas para participar en determinados ritos que la misma ley de Moisés establecía. Sin embargo, a raíz de la muerte y resurrección del Señor Jesucristo, la ley de Moisés fue abolida para los que hemos confiado en Cristo como nuestro Salvador. Hoy en día la iglesia está bajo la gracia, no bajo la ley. Por eso es que en el Nuevo Testamento no se encuentra ningún principio en cuanto a que una mujer es impura durante su período menstrual. De manera que, acusar a la Biblia de ser caduca, o anticuada o contraria a la modernidad, no pasa de ser sino un pretexto para rechazar la responsabilidad moral y espiritual que Dios asigna al pecador.

  • ¿Será que el planeta actual va a ser destruido para crear uno nuevo?

    En Apocalipsis 21:1 se nos habla del cielo nuevo y tierra nueva. ¿Será que el planeta actual va a ser destruido para crear uno nuevo? ¿Es literal esta declaración? ¿O acaso podríamos pensar en una renovación del sistema ecológico y planetario al punto que podríamos llamar cielo nuevo y tierra nueva? Si tomamos como literal la expresión: “porque el primer cielo y la primera tierra pasaron”, entonces estaríamos hablando de exterminación de nuestro planeta, y del sistema solar y del universo en general. Si es así ¿Dónde habitarán los sobrevivientes del milenio, es decir aquellos que no se unan a la rebelión de Gog y Magog? ¿Serán transpuestos al otro mundo? ¿Serán transformados sus cuerpos? ¿Serán ellos los que necesiten la sanidad de la que habla Apocalipsis 22:2?

    Gracias por su pregunta. Cuando en Apocalipsis 21:1 se habla de que el primer cielo y la primera tierra pasaron, se lo debe interpretar en su sentido literal. El Nuevo Testamento inclusive provee información acerca de la manera cómo va a ser destruido el primer cielo y la primera tierra. 2 Pedro 3:10-13 dice: Pero el día del Señor vendrá como ladrón en la noche;  en el cual los cielos pasarán con grande estruendo,  y los elementos ardiendo serán deshechos,  y la tierra y las obras que en ella hay serán quemadas.  Puesto que todas estas cosas han de ser deshechas,  ¡cómo no debéis vosotros andar en santa y piadosa manera de vivir,  esperando y apresurándoos para la venida del día de Dios,  en el cual los cielos,  encendiéndose,  serán deshechos,  y los elementos,  siendo quemados,  se fundirán!

    Pero nosotros esperamos,  según sus promesas,  cielos nuevos y tierra nueva,  en los cuales mora la justicia.Note que se trata de destrucción total en fuego de los presentes cielos y la presente tierra. Esto es necesario para que Dios cree cielos nuevos y tierra nueva. No se trata de una restauración de lo antiguo sino de una nueva creación, luego de que todo lo antiguo ha sido destruido. A modo de reflexión, no tiene sentido gastarnos la vida haciendo tesoros en este mundo, porque algún día, tal vez más pronto de lo que pensamos, todo lo que existe en este mundo va a ser destruido por el fuego. Lo sensato es hacernos tesoros en el cielo donde no hay peligro de que alguna vez se destruyan.

    Hasta donde se puede discernir, la destrucción del presente cielo y la presente tierra, ocurrirá al final del reino milenial de Cristo en la tierra. Esto significa que para cuando Dios destruya el presente cielo y la presente tierra con fuego, en el planeta tierra no habrá ningún ser humano. Todos los incrédulos estarán en el lago de fuego acompañados de Satanás, del Anticristo y del Falso Profeta. Los creyentes de todas las épocas de la humanidad, es decir los del Antiguo Testamento, los de la iglesia, los de la tribulación y los del milenio, estarán con Dios en la nueva Jerusalén. La Biblia no revela con claridad la manera como los santos del milenio llegan a la nueva Jerusalén, pero es muy factible que ocurra algo semejante al rapto de la iglesia, es decir una transformación para que lo mortal se vista de inmortalidad. No se puede ser dogmático en cuanto a esto último, porque como mencioné la Biblia no lo ha revelado.

  • ¿Qué hay de verdad en cuanto a que los Testigos de Jehová han profetizado la fecha para la venida de Cristo al mundo y eso no se ha cumplido?

    La pregunta del día es la siguiente: ¿Qué hay de verdad en cuanto a que los Testigos de Jehová han profetizado la fecha para la venida de Cristo al mundo y eso no se ha cumplido? También acerca de que los Testigos de Jehová usan una Biblia adulterada y no les es permitido oír música secular.La pregunta del día es la siguiente: ¿Qué hay de verdad en cuanto a que los Testigos de Jehová han profetizado la fecha para la venida de Cristo al mundo y eso no se ha cumplido? También acerca de que los Testigos de Jehová usan una Biblia adulterada y no les es permitido oír música secular.

    Gracias por su pregunta. Efectivamente, los Testigos de Jehová. profetizaron que el Señor Jesús iba a venir por segunda vez en el año 1914. Cuando esta falsa profecía no se cumplió, inventaron algo para tapar su craso error y salieron del paso explicando que Cristo Jesús había venido por segunda vez, pero no a la tierra, sino al cielo para establecer el reino de Dios y ahora está gobernando en el cielo. Afirman que todas las evidencias demuestran que Jesús tomó su poder real y comenzó a reinar desde el cielo en el año 1914. Esta fue su manera para tapar su falsa profecía. Pero la Biblia dice al menos un par de cosas respecto a esto. Primero, que este error delata a los Testigos de Jehová como falsos profetas. Deuteronomio 18:22 dice: si el profeta hablare en nombre de Jehová, y no se cumpliere lo que dijo, ni aconteciere, es palabra que Jehová no ha hablado; con presunción la habló el tal profeta; no tengas temor de él. Segundo, la Biblia dice que la segunda venida del Señor Jesucristo será visible para todo ser humano que esté vivo cuando este evento acontezca.

    Ponga atención a lo que dice Apocalipsis 1:7 He aquí que viene con las nubes,  y todo ojo le verá,  y los que le traspasaron;  y todos los linajes de la tierra harán lamentación por él.  Sí,  amen.La Biblia habla de que la segunda venida de Cristo será un evento que se puede percibir con los sentidos, no algo espiritual o algo secreto como sostienen los Testigos de Jehová. La Biblia dice que nadie, aparte del Padre sabe el día y la hora en la que ha de venir el Señor Jesucristo por segunda vez. Los Testigos de Jehová cayeron en el error de fijar fecha para la segunda venida de Cristo y eso les delata como falsos profetas por cuando lo que profetizaron no se cumplió. En cuanto a la Biblia, según los Testigos de Jehová, todas las traducciones existentes de la Biblia contienen errores, así que, se dieron el trabajo de hacer su propia traducción de una Biblia sin errores, según ellos.

    El producto de esto es lo que en español se conoce como la Traducción del Nuevo Mundo de las Santas Escrituras. Cuando se examina esta traducción se hace obvio que es una manipulación de las Sagradas Escrituras para apoyar las doctrinas que los Testigos de Jehová siempre han sostenido. Un examen minucioso de las doctrinas de los Testigos de Jehová demuestra que no son lo que afirman ser, el único canal colectivo para que fluya la verdad bíblica. Son culpables de haber anunciado falsas profecías, de sostener una teología contraria a la Biblia y de tergiversar la verdad. Con relación a la música, La Biblia habla de que una de las manifestaciones de la llenura del Espíritu Santo es justamente una vida de alabanza a Dios. Note lo que dice Efesios 5:19  hablando entre vosotros con salmos,  con himnos y cánticos espirituales,  cantando y alabando al Señor en vuestros corazonesEl uso de la música para cantar y alabar al Señor es muy apropiado. Que los creyentes oigan o no música secular queda a discreción de los creyentes. La Biblia no condena que los creyentes escuchen música secular, siempre y cuando esto no viole cualquier otro principio bíblico.

  • ¿La salvación es para los que pertenecen a la religión de los Testigos de Jehová?

    La pregunta para este día es la siguiente: Trabajo con un señor que es Testigo de Jehová. Estábamos conversando y me dijo que en Alemania, durante la segunda guerra mundial murieron muchos Testigos de Jehová, a causa de su fe, por cuanto ellos se niegan enrolarse en el ejército. Me dijo también que la salvación es para los que pertenecen a la religión de los Testigos de Jehová, algo con lo cual yo no estoy de acuerdo porque eso sería equivalente a salvación por obras. Me dijo que yo estaba equivocada. ¿Podría citarme algunos versículos para confirmar lo que yo creo?

    Gracias por su pregunta. Efectivamente, algunos Testigos de Jehová sufrieron persecución durante la segunda guerra mundial en Alemania a causa de algunas prácticas que se sustentan en sus convicciones religiosas. Pero este hecho, sumamente trágico ciertamente, de ninguna manera transforma en verídicas las falsas creencias de los Testigos de Jehová y por ende sus falsas práctica, porque conocido es que una falsa doctrina inevitablemente produce una falsa práctica. El rechazo a enrolarse en la milicia de los países es sólo uno de los muchos errores de los Testigos de Jehová. Tampoco prometen con juramento lealtad a la bandera de sus países, tampoco cantan el himno nacional de sus países, tampoco aceptan una transfusión sanguínea, tampoco celebran los cumpleaños de la gente, tampoco celebran navidad. Pero lo más grave de los Testigos de Jehová tiene que ver con la doctrina. Por ejemplo, en lo que tiene que ver con la salvación. Considere los siguiente, en la doctrina de los Testigos de Jehová, la salvación no se considera como un don gratuito de Dios, o como un regalo de Dios, fundamentado en la obra del Señor Jesucristo al morir en la cruz del Calvario.

    En la literatura producida por los Testigos de Jehová se insiste en la salvación por obras. Russell, el fundador de los Testigos de Jehová, lo plasmó de esta manera en uno de sus escritos: Tienen que recuperarse, tanto de la ceguera como de la muerte, para que cada uno pueda tener por sí mismo una oportunidad completa de demostrar, por medio de la obediencia que merece la vida eterna. En otro escrito afirma lo siguiente: Todos los que debido a su fe en Jehová Dios y en Cristo Jesús se dedican a hacer la voluntad de Dios, y por tanto llevan a cabo con fidelidad su consagración, serán recompensados con la vida eterna.

    Esto es lo que los Testigos de Jehová creen en cuando a la salvación. Pero la Biblia enseña que somos salvos por gracia por medio de la fe. Las buenas obras del hombre nunca pueden contribuir a su salvación. La salvación no se merece como afirman los Testigos de Jehová, sino que se lo recibe como un regalo de gracia por medio de la fe en la persona y obra del Señor Jesucristo. Uno de los muchos textos bíblicos sobre los cuales descansa esta verdad es Efesios 2:8-9 donde dice: Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; no por obras, para que nadie se gloríe.

    Como si esto fuera poco, note lo que tenemos en Tito 3:5 nos salvó, no por obras de justicia que nosotros hubiéramos hecho, sino por su misericordia, por el lavamiento de la regeneración y por la renovación en el Espíritu Santo,
    El camino a la salvación, no es la religión, cualquiera que sea, ni la de los Testigos de Jehová, sino la persona y obra del Señor Jesucristo.

  • He oído que LOS CRISTADELFIANOS son UNA SECTA ANTICRISTIANA ¿QUE HAY DE ESO?

    Gracias por su pregunta. La información que voy a compartir con usted ha sido tomada de un sitio en Internet de los mismos Cristadelfianos. Se definen a ellos mismos como los que proclaman el pronto establecimiento del Reino de Dios en la tierra. Hasta aquí no hay ningún problema por cuanto todo genuino creyente debe proclamar el pronto establecimiento del Reino de Dios en la tierra, asumiendo por supuesto que esto se refiere al establecimiento del reino milenial del Señor Jesucristo en la tierra.

    Pero uno comienza a preocuparse cuando los Cristadelfianos señalan que no pueden tolerar las posiciones del cristianismo tradicional en cuanto a algunas doctrinas importantes entre las cuales está la doctrina bíblica de la deidad del Señor Jesucristo. Dicen que la mortalidad y la inmortalidad son características absolutas. No se puede ser las dos cosas. Dios es inmortal, y no puede morir. Como Cristo murió, por tanto no puede ser Dios. Pero en respuesta a esto, la Biblia enseña de una manera clara y enfática que el Señor Jesucristo es 100% Dios y a la vez 100% hombre. Hablando del Señor Jesucristo, el Verbo, note lo que dice Juan 1:1 En el principio era el Verbo,  y el Verbo era con Dios,  y el Verbo era Dios. Cristo, el verbo era es, y será Dios. Este Verbo se hizo carne y jamás perdió su esencia divina.

    Esta es una verdad que rebasa la capacidad de comprensión del hombre, pero no por eso se debe desecharlo como han hecho los Cristadelfianos. En el Señor Jesucristo se funden las dos naturalezas, la humana y la divina. Como humano, el Señor Jesucristo se cansó, lloró, comió, durmió y todo lo demás que es común al hombre con excepción del pecado. Como Dios, calmó una tempestad, resucitó muertos, manifestó su gloria y tantas otras cosas más. Desde hace siglos se ha tildado al cristianismo bíblico de politeísta por el hecho de aceptar el testimonio bíblico cuando afirma que el Padre es Dios, que el Hijo es Dios y que el Espíritu Santo es Dios, así que no es nuevo que los Cristadelfianos ataquen la doctrina de la trinidad. Lo que voluntariamente quieren ignorar los detractores de la doctrina, de la trinidad es que el cristianismo bíblico no admite la existencia de una pluralidad de dioses sino la existencia de un solo y verdadero Dios. Por el hecho que el Señor Jesucristo es totalmente Dios y totalmente hombre.

    La Biblia es drástica al condenar a los que niegan esta realidad. Observe lo que dice 2 Juan 9-11: Cualquiera que se extravía,  y no persevera en la doctrina de Cristo,  no tiene a Dios;  el que persevera en la doctrina de Cristo,  ése sí tiene al Padre y al Hijo.  Si alguno viene a vosotros,  y no trae esta doctrina,  no lo recibáis en casa,  ni le digáis:  ¡Bienvenido!  Porque el que le dice:  ¡Bienvenido!  participa en sus malas obras. Así que, a todas luces, los Cristadelfianos alegan defender la Biblia pero a la vez rechazan doctrinas fundamentales como la deidad de Jesucristo, así como la trinidad, la obra sustitutoria de Cristo, el estado de los muertos antes de la resurrección y otras cosas más. Por este motivo, lo que ha oído acerca de los Cristadelfianos es verídico. Su doctrina no se ajusta a lo que dice la Biblia.

     

  • ¿Hacia dónde fueron esparcidas las doce tribus de Israel? ¿Dónde se encuentran actualmente?.

    Tenemos que remitirnos a la historia para contestar esta pregunta. En cierto momento, Israel pidió un rey. Dios concedió ese pedido, a pesar que eso significó un tácito rechazo a su derecho de gobernar, lo cual venía haciendo a través de los jueces. Saúl fue nombrado rey y gobernó por cuarenta años. Luego de muchos problemas le sucedió David, quien gobernó también por cuarenta años. David fue sucedido por su hijo Salomón, quien también gobernó por cuarenta años. Al final del reinado de Salomón, el reino de Israel se dividió. Las diez tribus del Norte fueron gobernadas por Jeroboam y las dos tribus del Sur, Judá y Benjamín, por Roboam. A partir de aquí las tribus de Israel fueron gradualmente alejándose más y más de Dios. Las diez tribus del Norte tuvieron como último rey a Oseas. 2 Reyes 17:6-7 nos relata la manera trágica como termino este reino. Dice así:

    «En el año nueve de Oseas, el rey de Asiria tomó Samaria, y llevó a Israel cautivo a Asiria, y los puso en Halah, en Habor junto al río Gozan, y en las ciudades de los medos. Porque los hijos de Israel pecaron contra Jehová su Dios, que los sacó de tierra de Egipto, de bajo la mano de Faraón rey de Egipto, y temieron a dioses ajenos».

    Lo más cercano que se puede ubicar estos lugares es alrededor del Mar Caspio. No existe ninguna evidencia de que alguna de estas diez tribus haya vuelto a su tierra natal. En el lugar donde fueron colocadas se integraron a los pueblos que habitaban allí y solamente Dios sabe dónde están en la actualidad.

    En cuanto a las dos tribus del Sur, más conocidas como Judá siguieron la misma senda, sólo que unos años más tarde. Se reconoce tres deportaciones. Primera, en el año 606 AC siendo Joaquín rey de Judá, fue aquí cuando Daniel y sus compañeros fueron deportados a Babilonia. Después en el año 598 AC siendo Joaquín rey de Judá fueron deportados más de 3000 judíos a Babilonia. Por último, en el año 586 AC cuando reinaba Sedequías, Jerusalén fue destruida y todos los tesoros del templo fueron llevados a Babilonia. En Babilonia permanecieron setenta años, y fueron tratados con benevolencia, más como colonos que como cautivos. Babilonia es lo que actualmente se llama Irak. Después de setenta años, regresaron a Jerusalén y en cierto modo prosperaron por un tiempo para luego alejarse otra vez del Dios verdadero.

    Fue en estas circunstancias cuando Dios envió a su Hijo en la persona del Señor Jesús, pero fue violentamente rechazado y crucificado. Como resultado de este hecho execrable, Judá fue hollada por los romanos, siendo la toma de Jerusalén en el año 70 DC el evento más sobresaliente y sangriento de este episodio. Según el historiador judío Josefo, cuando el emperador romano Tito destruyó Jerusalén, mató a más de un millón de judíos y el resto fueron dispersados por todo el mundo y han permanecido así hasta el año 1948, cuando las Naciones Unidas reconoció al estado soberano de Israel, en el territorio donde está en la actualidad. A partir de este año, los israelitas han retornado poco a poco a su tierra natal en cumplimiento de las profecías bíblicas, pero sin saber a qué tribu original pertenecen. ¿A qué pueblos exactamente fueron esparcidos? No se conoce a ciencia cierta.