En realidad simpatizamos con Ud. ante la difícil tarea de escoger una iglesia local buena, o quizá mejor, una iglesia local sana.
Lo que pasa es que con la proliferación de las iglesias, existen para todos los gustos y sabores y realmente cuesta ubicar la que más nos conviene para nuestro crecimiento espiritual.
Lo que vamos a sugerir son parámetros que de seguro le van a ayudar a escoger una iglesia local sana.
Primero. Busque una iglesia donde Cristo Jesús sea el centro de todo. Esto parece algo elemental, pero es impresionante como es pasado por alto en no pocas iglesias locales.
Conozco iglesias locales, en las cuales el centro de ellas es el pastor, o la esposa del pastor o la junta administrativa o la comisión directiva o como se lo llame, o el templo o las finanzas o la calidad de los que asisten por su posición social o económica.
Recuerde que cuando Cristo no está en el centro de una iglesia local, Cristo no está en ningún lado. El no puede aceptar ningún otro lugar que no sea el centro. La iglesia local sana es Cristocéntrica.
En segundo lugar, la iglesia local sana tiene a la Biblia como su manual de doctrina y práctica. Esto también parece algo elemental, pero es pasado por alto en tantas iglesias locales, cuando los líderes de la iglesia hablan de política, de la cultura, de las artes, de las necesidades sociales de la gente, de la ciencia, etc. y dejan totalmente a un lado la palabra de Dios.
Un hermano y amigo estuvo de paso por cierta gran ciudad de su país. Como quería congregarse en una iglesia local el día domingo asistió a la primera que se cruzó en su camino. Todo estuvo muy bien, pero la persona que dio el mensaje a ningún momento citó la Biblia. Todo resultó ser sus opiniones y su forma particular de mirar las cosas.
Si una iglesia local pone a un lado la Biblia y se concentra en cualquier otra cosa, ha perdido totalmente el rumbo.
Tercero, tiene que ser una iglesia local donde los que allí se congregan están procurando vivir vidas santas. Qué lástima que se tolera el pecado en muchas iglesias locales. No estamos diciendo que los creyentes que van a cualquier iglesia local deben ser perfectos, sin contaminación alguna con el pecado. Solo en el cielo estaremos libres del pecado.
Lo que estamos diciendo es que los líderes de la iglesia deben exhortar continuamente a los creyentes a abandonar el pecado y si alguien por desgracia cae en pecado, deben juzgarlo con energía, conforme a la enseñanza de la palabra de Dios. Si la iglesia local tolera el pecado en sus miembros, jamás verá el poder de Dios.
Cuarto, la iglesia local sana, es aquella que brinda oportunidades de servicio a los creyentes que allí se congregan. En algunas iglesias locales, existe una casta privilegiada que piensa que son los únicos que tienen el derecho de servir en la iglesia. Los demás están solo de adorno, para llenar los bancos. La iglesia local sana es aquella en la cual los líderes comparten la carga del ministerio con los creyentes.
Por supuesto que previo a ello habrá que capacitar a los creyentes, pero jamás se debe pensar que solo un grupo minúsculo es el llamado para servir en la iglesia. La palabra d Dios dice que todos los creyentes somos sacerdotes de Dios. Por tanto todos debemos estar ministrando de una u otra manera en la iglesia, en el hogar, en la oficina, etc. Si no tenemos oportunidades de servicio en la iglesia local nos volvemos sacerdotes mudos.
Quinto, la iglesia local sana es aquella que manifiesta un genuino interés en el bienestar integral de los que allí se congregan. Si Ud. va a una reunión en una iglesia local y nadie le presta atención, y en consecuencia pasa desapercibido, es muy probable que esa iglesia local no sea una buena elección. Puede ser que sea una iglesia donde nadie se preocupa de nadie. El ambiente en la iglesia local debe ser como en familia, donde todos se interesan por todos.
Ciertamente que nadie debería buscar una iglesia local para ver qué es lo que puede sacar de ella, sino para ver qué es lo que puede entregar a ella, pero existen algunas iglesias donde no se puede dar ni recibir, porque los que ya están allí forman un círculo muy cerrado que claramente comunica: Aquí no aceptamos a nadie más.
Sexto, una iglesia local sana es aquella que da énfasis al discipulado personal. El discipulado personal es el que un creyente maduro se ocupe personalmente de un creyente tierno para ayudarle a crecer espiritualmente. Solo así se puede cumplir con el mandato del Señor de ir y hacer discípulos a todas las naciones. Lamentablemente, muchas iglesias locales ni siquiera se han enterado de esto del discipulado y en consecuencia no están cumpliendo con esta parte tan importante de la gran comisión.
Séptimo, una iglesia local sana, es aquella que da mucha importancia al evangelismo y las misiones. Una de las funciones más importantes de toda iglesia local es anunciar el evangelio a la comunidad. Si la iglesia local no tiene metas y planes de evangelismo, ha perdido en gran parte su razón para existir. Una parte importante del evangelismo son las misiones. La iglesia local sana debería enviar misioneros y si esto no es posible, al menos debería sostener económicamente aunque sea en parte a algunos misioneros.
Así que, si Ud. encuentra una iglesia local con al menos estas características, estamos seguros que habrá encontrado una buena iglesia local.