El propósito del don de lenguas

Qué bueno que es nuestro gran Dios al permitirnos que estemos junto a usted, amiga, amigo oyente. Bienvenida, bienvenido al estudio bíblico de hoy. La primera epístola de Pablo a los Corintios es un mensaje oportuno para una iglesia en crisis. Este ha sido el tema de nuestros últimos estudios bíblicos. En esta oportunidad, David Logacho nos guiará en el estudio de lo que el apóstol Pablo enseña en cuanto al propósito del don de lenguas.

En la primera epístola de Pablo a los Corintios, encontramos tres capítulos dedicados a los dones espirituales. Los capítulos 12, 13 y 14. Uno de estos capítulos, precisamente el capítulo 14 está dedicado exclusivamente a poner orden en cuanto al uso del don de lenguas. Pablo ha hecho un contraste entre el don de profecía y el don de lenguas, para mostrar sus diferencias. Después Pablo ha mostrado la superioridad del don de profecía en relación con el don de lenguas. En el pasaje bíblico de hoy, Pablo va a mostrar el propósito del don de lenguas. Sobre esto existía mucha confusión en la iglesia de Corinto, así como hay mucha confusión en la iglesia de hoy en día. Algunos pensaban que solamente las personas muy maduras espiritualmente hablando, podían tener el don de lenguas. Creían que hablar en lenguas era señal de madurez espiritual. Otros pensaban que el don de lenguas era la evidencia de que se ha recibido lo que ellos llamaban el bautismo del Espíritu Santo. El nuevo Testamento no contiene la frase bautismo del Espíritu Santo, porque no es el Espíritu Santo quien bautiza, sino Cristo. Cristo bautiza en el Espíritu Santo, o con el Espíritu Santo o por el Espíritu Santo, y el resultado de esta obra de Cristo es que todo creyente es introducido en el cuerpo de Cristo que es la iglesia. Otros estaban usando el don de lenguas simplemente para hacer inflar su ego. Tal vez decían: Miren lo maravilloso que soy, estoy hablando en lenguas. Era obvio que los creyentes corintios no entendían cuál es el propósito de los dones espirituales. Por eso justamente Pablo va a utilizar parte de la historia del pueblo de Israel para dejar bien establecido cuál es el propósito del don de lenguas y además lo nefasto que resulta de ignorar este propósito. Abramos pues nuestras Biblias en 1 Corintios 14:20-25. Lo primero que notamos es una exhortación a la madurez en el modo e pensar. 1 Corintios 14:20 dice: «Hermanos, no seáis niños en el modo de pensar, sino sed niños en la malicia, pero maduros en el modo de pensar.» Pablo está hablando a los creyentes de Corinto, una iglesia en la cual estaban presentes todos y cada uno de los dones espirituales, pero el mal uso de algunos de estos dones espirituales estaba demostrando que eran maduros en la malicia, pero niños en el modo de pensar. Estaban enamorados de los dones que ellos consideraban los más llamativos, como el don de lenguas, el don de interpretación de lenguas, el don de sanidad y el don de milagros. Maduros en la malicia en este caso, significa que se habían dejado arrastrar por sus propias ideas, o por las emociones que afloraban con exhuberancia. Niños en el modo de pensar, en este caso, significa que no usaron su intelecto para reconocer cuál es el verdadero propósito de los dones espirituales. Fallaron, por ejemplo, en mirar lo que dice Dios en su palabra en cuanto a la razón para la existencia del don de lenguas. Por eso es que Pablo les dice: Debería ser lo contrario mis hermanos corintios. Mejor sería que sean niños en la malicia y maduros en el modo de pensar. Es un llamado a no dejarse arrastrar por lo que a uno le parece, o por lo que hacen los demás, o por lo que uno siente que debe hacer, sino dejarse guiar por lo que Dios ha dicho en su palabra. La conducta cristiana en todos sus campos, amable oyente, no debe estar determinada ni por lo que me piden hacer, ni por lo que hacen los demás, ni siquiera por lo que yo siento que debo hacer. La conducta cristiana debe estar determinada por lo que dice Dios en su palabra. Esto es lo que significa ser maduros en el modo de pensar. ¿Es usted maduro en el modo de pensar? O se ha embarcado en la aventura de dejarse llevar de sus emociones o de lo que los demás hacen. Cuidado amable oyente. No olvide la exhortación de Pablo: No seáis niños en el modo de pensar, sino sed niños en la malicia, pero maduros en el modo de pensar. La transición entonces es natural. Pablo nos va a dar la información necesaria para ser maduros en el modo de pensar en el cuanto al propósito del don de lenguas. 1 Corintios 14:21-22 dice: «En la ley está escrito: En otras lenguas y con otros labios hablaré a este pueblo, y ni aun así me oirán, dice el Señor. Así que, las lenguas son por señal, no a los creyentes, sino a los incrédulos; pero la profecía, no a los incrédulos, sino a los creyentes» El don de lenguas obedece a la forma de actuar de Dios desde épocas remotas cuando traía juicio al pueblo de Israel a causa de su pecado. Cuando Pablo dice: En la ley está escrito, se está refiriendo a algo que consta por escrito en los escritos sagrados de los judíos. ¿Qué es lo que está escrito? Pablo cita libremente lo que está escrito. Dice: En otras lenguas y con otros labios hablaré a este pueblo; y ni aun así me oirán, dice el Señor. ¿En dónde aparece esta escritura? Bueno, está en Isaías 28:11-12 donde dice: «porque en lengua de tartamudos, y en extraña lengua hablará a este pueblo, a los cuales él dijo: Este es el reposo; dad reposo al cansado; y este es el refrigerio; mas no quisieron oír» El profeta Isaías escribió su libro en un tiempo de sequía espiritual en Israel. A pesar de los muchos e insistentes llamados de atención, el pueblo de Israel siguió su camino descendente de pecado. A Dios no le quedó sino traer juicio o castigo al pueblo de Israel. Más o menos por el año 722 AC, las diez tribus del Norte fueron conquistadas por el imperio Asirio y llevadas al exilio. De pronto, los israelitas estaban escuchando un idioma que no entendían. Era el idioma de los asirios. El idioma de los asirios sonaba a los oídos de los israelitas como lengua de tartamudos y lengua extraña. Era Dios dando una señal al pueblo. Pero a pesar de eso el pueblo se resistió a volverse de su pecado. Más tarde, Dios levantó al imperio babilónico para conquistar a las dos tribus del sur y fue así como entre los años 605 a 586 AC el pueblo de Israel fue al exilio. Una vez más, a causa de su pecado, el pueblo de Israel volvió a oír voces que no entendían. El idioma de los babilonios les sonaba a los oídos de los israelitas como lengua de tartamudos y extraña lengua. Era Dios dando una señal al pueblo. Pero a pesar de eso el pueblo se resistió a volverse de su pecado. Pasaron los siglos y vino el Hijo de Dios en forma humana, en la persona de Jesús, pero ¿Qué hizo el pueblo de Israel? Pues como nación, lo rechazó y terminó clavándolo en una cruz donde murió. Una vez más el pueblo persistió en su pecado. Dios por tanto debía enviar su juicio o castigo. Pero antes de eso, el pueblo tenía que escuchar mensajes en un idioma que no entendían. Eso se cumplió el día de Pentecostés, cuando una vez más, los israelitas oyeron voces sin entender su significado. Era Dios nuevamente dando una señal al pueblo de Israel. Pero el pueblo de Israel, como históricamente había sucedido, no se volvió de su pecado y fue así como en el año 70 DC Dios utilizó al imperio romano para destruir la ciudad de Jerusalén y llevar al exilio a toda la nación. A esto se está refiriendo Pablo cuando dice: Así que, las lenguas son por señal, no a los creyentes sino a los incrédulos. Las lenguas amable oyente son señal de juicio inminente de parte de Dios, juicio para los judíos incrédulos, no para los judíos creyentes. En cambio la profecía, o ese mensaje claro en un idioma comprensible para todos es alimento para todos los creyentes en general, sin importar si su trasfondo es o no judío. El no tomar en cuenta este propósito del don de lenguas puede arrastrar a un caos total en la iglesia. De esto habla Pablo en 1 Corintios 14: 23-25 donde dice: «Si, pues, toda la iglesia se reúne en un solo lugar, y todos hablan en lenguas, y entran indoctos o incrédulos, ¿no dirán que estáis locos? Pero si todos profetizan, y entra algún incrédulo o indocto, por todos es convencido, por todos es juzgado; lo oculto de su corazón se hace manifiesto; y así, postrándose sobre el rostro, adorará a Dios, declarando que verdaderamente Dios está entre vosotros.» Trate de hacerse una imagen mental del cuadro que Pablo está pintando. La iglesia está reunida, tal vez todos están hablando en idiomas que los demás no entienden. El ruido y la confusión son impresionantes. En eso entran de visita algunos indoctos, esta palabra significa los que no tienen idea de lo que está pasando, y otros que son incrédulos. ¿Qué impresión se van a llevar estos visitantes? Pablo dice que la impresión que se van a llevar es que todos en esa iglesia están locos, y desafortunadamente no locos por el Señor sino locos de la cabeza. Ahora trate hacerse una imagen mental de otro escenario. La iglesia está reunida. Uno tras otro se levantan los creyentes en orden para entregar un mensaje en un idioma comprensible para todos. En eso entran de visita indoctos o incrédulos y comienzan a escuchar de cada uno lo que Dios tiene para comunicar. ¿Cuál va a ser la reacción de estos visitantes? Pablo dice: Habrán escuchado tanta palabra de Dios, que se convencerán de su pecado, reconocerán lo mal que están, verán cuán pecaminoso es su corazón, y recibirán a Cristo como su Salvador postrando su rostro en tierra. Así adorarán a Dios, declarando que verdaderamente Dios está en medio de esa iglesia. ¿Ve la diferencia? Lamentablemente, las prácticas contrarias a la Biblia, atribuidas erróneamente al Espíritu Santo, ahuyentan a los incrédulos de las iglesias. Que por la gracia de Dios tengamos bien en claro cuál es el propósito de Dios para el don de lenguas.

Antes de despedirnos queremos agradecerle por su sintonía y además le invitamos a visitar nuestra página en Internet y nos haga llegar sus comentarios acerca del programa y además conozca la respuesta a la PREGUNTA DEL DÍA Hebreos 6:18 dice que es imposible que Dios mienta, pero Mateo 19:26 dice que para Dios todo es posible. ¿Cómo se puede armonizar estas dos declaraciones? Nuestra dirección en la Internet es: labibliadice.org Hasta la próxima y que Dios le bendiga ricamente.

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