La palabra Hades aparece únicamente en el Nuevo Testamento y se refiere al lugar de tormento en fuego donde están las almas y espíritus de todos los seres humanos que han muerto sin haber recibido el perdón de sus pecados. Lucas 16:22-23 dice: Y murió también el rico, y fue sepultado. Y en el Hades alzó sus ojos estando en tormentos. Más adelante en Lucas 16:24 el rico dice que en el Hades está atormentado en llama. En cuanto a la palabra infierno, es la traducción de la palabra griega “gehena” el nombre de un lugar en el valle de Hinom, donde se había ofrecido sacrificios humanos, en el cual se arrojaba cadáveres de animales muertos y además se quemaba continuamente la basura de la ciudad de Jerusalén. Era un lugar pestilente, sombrío y saturado de humo, que lo hacía un símbolo adecuado del tormento en fuego. Mateo 5:22 dice: Pero yo os digo que cualquiera que se enoje contra su hermano, será culpable de juicio; y cualquiera que diga: Necio, a su hermano, será culpable ante el concilio; y cualquiera que le diga: Fatuo, quedará expuesto al infierno de fuego.
La palabra infierno por tanto denota tanto al Hades, como al lago de fuego. Al decir que un incrédulo que ha muerto va al infierno se debe entender en el sentido de que va al Hades el lugar de tormento en fuego donde están las almas y espíritus de todos los que han muerto sin haber recibido a Cristo como Salvador. El Nuevo Testamento muestra que llegará un momento cuando todos los incrédulos muertos van a resucitar y se van a presentar ante el juicio del gran trono blanco, donde escucharán su sentencia eterna de ser arrojados al lago de fuego. Sobre la base de todo lo dicho, todo incrédulo que ha muerto, entre los cuales está Pilato, está actualmente en el infierno, entendiéndose que la palabra infierno se refiere al Hades, el lugar de tormento en fuego donde están las almas y espíritus de todos los que han muerto sin haber hallado perdón de pecados. Un día futuro, todos los muertos incrédulos que están en el Hades van a resucitar y luego de comparecer en el juicio del gran trono blanco van a ser arrojados al lago de fuego, el lugar de tormento en fuego donde estarán por la eternidad acompañados de Satanás, el Anticristo, el falso profeta, los demonios. La palabra infierno también denota a este lago de fuego. Por ahora, en el lago de fuego no existe nadie, y en el Hades están todos los que han muerto sin haber obtenido su salvación. Resumiendo entonces, Hades es el lugar de tormento en fuego donde están en la actualidad las almas y espíritus de todos los que no aprovecharon su oportunidad de hallar salvación mientras estuvieron vivos en este mundo. La palabra infierno denota simplemente el tormento en fuego tanto en el Hades, como en el lago de fuego, el lugar donde, con cuerpos resucitados, ya no solo en alma y espíritu, sufrirán pena de eterna condenación en fuego todos aquellos que jamás arreglaron su problema de pecado con Dios.