Jesucristo tomó alguna bebida alcohólica en las bodas de Caná.
Contestando esta pregunta, sobre si Jesucristo tomó o no alguna bebida alcohólica en las bodas de Caná, comenzaré diciendo que para los judíos de la época de Jesucristo era una costumbre ingerir vino mezclado con agua en una proporción de entre 3 a 10 por uno, esto es una medida de vino mezclada con tres a diez medidas de agua.
Para embriagarse con una bebida de esta naturaleza se necesitaba pasar mucho tiempo tomando esa mezcla. En el relato de las bodas de Caná una cosa es cierta, Jesús hizo el milagro de convertir aguan en vino. Pero en este relato no se afirma ni se niega que Jesús hubiera tomado esa bebida. No se puede decir más de esto.
Lo que sí se puede decir es que no se debe tomar el milagro de Jesús en las bodas de Caná como un argumento para justificar la práctica de ingerir bebidas alcohólicas sin embriagarse. Un hombre que le gustaba mucho tomar vino dijo a cierto predicador lo siguiente, para justificar su hábito: Después de todo, Jesús transformó el agua en vino. La respuesta del predicador fue: Si Usted quiere seguir el ejemplo de Jesús para justificar su vicio, ¿Por qué no sigue su ejemplo en todo lo demás?
Luego le leyó Lucas 22:18 donde dice: «Porque os digo que no beberé más del fruto de la vid, hasta que el reino de Dios venga»
Con esto estaba demostrando que Jesús es totalmente abstemio hasta el día de hoy. De manera que, Dios condena la borrachera. El creyente tiene la libertad de ingerir bebidas alcohólicas con moderación, pero un creyente maduro estará dispuesto a ceder gustosamente ese derecho por amor, para no herir a otros creyentes que podrían tropezar al ver que en sus manos está una copa de licor.
Jesús cambió milagrosamente el agua en vino en las bodas de Caná, no necesariamente para poder tomar vino, sino para mostrar sus credenciales divinas y es incorrecto tomar este hecho milagroso para justificar el ingerir bebidas alcohólicas en la actualidad.