¿Que puedo decirles a los mormones?

Mi hijo ha sido abordado por una pareja de mormones y le han dicho que el hombre existe desde la eternidad pasada. Mi hijo no ha sabido como responder. ¿Qué pudo haberles dicho?

Efectivamente los Mormones sostienen que el alma del hombre existe desde la eternidad pasada y toma un cuerpo al nacer en este mundo.

Note lo que afirma el fundador de los Mormones, José Smith, en el libro que se llama “Progreso del Hombre” Dice así: El hombre es un espíritu revestido con un tabernáculo; su parte inteligente nunca fue creada ni hecha, sino que existió eternamente; el hombre también estaba en el principio con Dios. ¿Qué le parece?

Hablando también del hombre, John Widtsoe afirma: Existía antes de venir a la tierra. Estaba con Dios en el principio. El destino del hombre es divino. El hombre es un ser eterno. Él también es desde la eternidad y hasta la eternidad.

De modo que, efectivamente, para los mormones el hombre es un alma preexistente que toma cuerpo al nacer en este mundo.

Pero ¿qué dice la Biblia? Y esto es lo que su hijo pudo haber mencionado a los mormones que le abordaron. Pues la Biblia dice que el hombre es un ser creado por Dios. Observe lo que dice Génesis 1:26-27 “Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra. Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó.”

Algunos rebaten este texto bíblico diciendo que se refiere solo a la parte material del hombre, no a la parte inmaterial. Pero el texto afirma que tanto la parte inmaterial como la parte material fueron creadas por Dios.

Esto se confirma con textos como Zacarías 12:1 donde dice: “Profecía de la palabra de Jehová acerca de Israel. Jehová, que extiende los cielos y funda la tierra, y forma el espíritu del hombre dentro de él, ha dicho”

Queda claro entonces que el hombre en su totalidad es una obra creativa de Dios. Solo el Hijo de Dios, el Cristo, es preexistente y por tanto existe desde la eternidad y por la eternidad.