Autor: cris

  • Diezmo

    En algunas iglesias evangélicas se acostumbra exigir que los que allí se congregan entreguen el diezmo y las primicias. ¿Es esta práctica correcta a la luz de lo que enseña la Biblia? 

    Vamos a leer algunos pasajes bíblicos en los cuales la palabra de Dios nos provee de información sobre este importante asunto.

    1º Corintios 16:1-2 dice: «En cuanto a la ofrenda para los santos, haced vosotros también de la manera que ordené en las iglesias de Galacia. Cada primer día de la semana cada uno de vosotros ponga aparte algo, según haya prosperado, guardándolo, para que cuando yo llegue no se recojan entonces ofrendas. La ofrenda, lejos de ser un deber, es un privilegio no de unos pocos creyentes a quienes les sobra el dinero, sino de absolutamente todos los creyentes, sin importar si son ricos o pobres. por eso el apóstol pablo hablando a los creyentes de Corinto y también a nosotros, dice: cada uno de vosotros ponga aparte algo de lo que ha recibido de parte de Dios. En este pasaje bíblico se observa también que el día ideal para llevar a cabo esta acción de poner aparte algo, es el primer día de la semana, es decir el Domingo. De aquí parte la costumbre de las iglesias evangélicas de recoger las ofrendas los días Domingo. No es que sea pecado o contrario a la Biblia el recoger ofrendas otros días de la semana, pero el Domingo es el día especialmente dedicado para este propósito. También se observa que el monto a ofrendar no es establecido ni en cantidad ni en porcentaje. La instrucción del Nuevo Testamento es simplemente: Según haya prosperado. A veces Dios prosperará mucho a un creyente y Dios espera que ese creyente le devuelva mucho en calidad de ofrenda. A veces Dios prosperará poco a un creyente y Dios espera que ese creyente le devuelva poco en calidad de ofrenda. Esto es lo que significa: Según haya prosperado. Sin embargo, no está descartado el dar al Señor más allá de lo que uno buenamente puede. Esto fue lo que hicieron los creyentes de Macedonia y por eso pablo les alabó diciendo que estos creyentes han dado con agrado conforme a sus fuerzas, y aun más allá de sus fuerzas. por último observamos que la iglesia local debe recolectar esas ofrendas y guardarlas para el propósito que la iglesia local determine según sus necesidades.

    2 Corintios 9:6-7 dice: «pero esto digo: El que siembra escasamente, también segará escasamente; y el que siembra generosamente, generosamente también segará. Cada uno dé como propuso en su corazón: no con tristeza, ni por necesidad, porque Dios ama al dador alegre.» En este pasaje bíblico encontramos el principio de que a mayor siembra mayor cosecha y a menor siembra menor cosecha. Aplicado al asunto de las ofrendas diríamos que a mayor ofrenda mayor beneficio para el ofrendante y a menor ofrenda menor beneficio para el ofrendante. El beneficio no es necesariamente en términos materiales, sino principalmente en términos espirituales. La ofrenda generosa de un creyente puede transformarse por ejemplo en Biblias o tratados evangelísticos que perfectamente pueden ser utilizados por Dios para que personas lleguen a conocer a Cristo como Salvador. Imagine, amigo oyente, por haber ofrendado con generosidad al Señor, Ud. habrá contribuido para que una persona sea rescatada del infierno y sea trasladada al reino del amado Hijo de Dios. Este beneficio es tan excelente que es imposible de ser cuantificado. Además nuevamente notamos que el privilegio de ofrendar no es para unos pocos que tienen mucho dinero sino para todos sin importar si tenemos mucho o poco. por eso el texto dice: Cada uno dé como propuso en su corazón. La forma de disponer el corazón para dar apropiadamente al Señor, consiste de dos partes. primero, no con tristeza. Dios ama al dador alegre, dice el texto. La alegría parte de tomar conciencia que con esa ofrenda estamos expresando el amor que tenemos a aquel que nos amó primero. por eso dice la palabra de Dios que más bienaventurada cosa es dar que recibir. El gozo es una actitud indispensable para predisponer el corazón para dar al Señor. Segundo, no por necesidad. La versión popular del Nuevo Testamento traduce esta frase como: No por la fuerza. Así como a Ud. no le agradaría la idea que alguien le ame a la fuerza, Dios también no se agrada de los que se sienten obligados a ofrendar. por esto el Nuevo Testamento enseña a no sentirse obligado a ofrendar. Ni los pastores, ni las iglesias, ni los predicadores deberían obligar a los creyentes a ofrendar, porque al hacerlo, esa ofrenda sería por necesidad o por la fuerza, lo cual contradice la clara enseñanza de la palabra de Dios. La ofrenda amigo oyente es un asunto privado entre el ofrendante y Dios. Nadie más debería entrometerse en ese asunto.

    Mateo 6:1-4 dice: «Guardaos de hacer vuestra justicia delante de los hombres, para ser vistos de ellos; de otra manera no tendréis recompensa de vuestro padre que está en los cielos. Cuando, pues, des limosna, no hagas tocar trompeta delante de ti, como hacen los hipócritas en las sinagogas y en las calles, para ser alabados por los hombres; de cierto os digo que ya tienen su recompensa. Mas cuando tú des limosna, no sepa tu izquierda lo que hace tu derecha, para que sea tu limosna en secreto; y tu padre que ve en lo secreto te recompensará en público»

    Esta es la correcta actitud para ofrendar. Nadie debe obligar a nadie a ofrendar y nadie debe averiguar de nadie cuanto ha ofrendado. La ofrenda es un asunto secreto entre el creyente y Dios.

  • Ezequiel 28:16-18

    ¿Qué clase de contrataciones son las que se mencionan en Ezequiel 28:16-18?

    Los versículos citados por Usted son parte de un pasaje bíblico que trata acerca de la caída de Satanás. Demos lectura a los versículos 13 a 18 del capítulo 28 donde dice: “En Edén, en el huerto de Dios estuviste; de toda piedra preciosa era tu vestidura; de cornerina, topacio, jaspe, crisolito, berilo y ónice; de zafiro, carbunclo, esmeralda y oro; los primores de tus tamboriles y flautas estuvieron preparados para ti en el día de tu creación. Tú querubín grande, protector, yo te puse en el santo monte de Dios, allí estuviste; en medio de las piedras de fuego te paseabas. Perfecto eras en todos tus caminos desde el día que fuiste creado, hasta que se halló en ti maldad. A causa de la multitud de tus contrataciones fuiste lleno de iniquidad y pecaste; por lo que yo te eché del monte de Dios, y te arrojé de entre las piedras del fuego, oh querubín protector. Se enalteció tu corazón a causa de tu hermosura, corrompiste tu sabiduría a causa de tu esplendor; yo te arrojé por tierra; delante de los reyes te pondré para que miren en ti. Con la multitud de tus maldades y con la iniquidad de tus contrataciones profanaste tu santuario; yo, pues saqué fuego de en medio de ti, el cual te consumió, y te puse en ceniza sobre la tierra a los ojos de todos los que te miran.”

    Muy bien. Satanás fue creado por Dios como un querubín grande protector. Fue perfecto en todos sus caminos desde el día que fue creado hasta el día en que se halló en él maldad.

    Como consecuencia fue arrojado por tierra y llegó a ser lo que es en la actualidad. Al describir la maldad de Satanás, la Biblia dice que a causa de la multitud de sus contrataciones fue lleno de iniquidad y pecó. Luego dice que con la iniquidad de sus contrataciones profanó su santuario.

    La palabra hebrea que se ha traducido como contrataciones se origina en un verbo hebreo que significa traficar o intercambiar mercadería. En su orgullo y arrogancia, Satanás tejió una red muy amplia para sentirse seguro y para atrapar a otros en su impiedad.

    En esta red, Satanás no tenía ningún escrúpulo para obtener provecho personal. A esto se refiere la multitud de sus contrataciones y la iniquidad de sus contrataciones.

  • 1ª Samuel 28:10-16

    El incidente relatado en 1ª Samuel 28:10-16 fue todo un truco o en verdad Samuel regreso de la tumba.

    Leamos el pasaje bíblico materia de esta consulta: 1ª Samuel 28:10-16 dice: «Entonces Saúl le juro por Jehová, diciendo: Vive Jehová, que ningún mal te vendrá por esto. La mujer entonces dijo: ¿A quien te haré venir?. Y él respondió: Hazme venir a Samuel. Y viendo la mujer a Samuel, clamo en alta voz, y hablo aquella mujer a Saúl, diciendo: ¿Por que me has engañado?. Pues tú eres Saúl. Y el rey le dijo: No temas. ¿Que has visto?. Y la mujer respondió a Saúl: He visto dioses que suben de la tierra. Él le dijo: ¿Cuál es su forma?. Y ella respondió: Un hombre anciano viene, cubierto de un manto. Saúl entonces entendió que era Samuel, y humillando el rostro a tierra, hizo gran reverencia. Y Samuel dijo a Saúl: ¿Por que me has inquietado haciéndome venir?. Y Saúl respondió: Estoy muy angustiado, pues los filisteos pelean contra mi, y Dios se ha apartado de mí, y no me responde mas, ni por medio de profetas ni por sueños; por esto te he llamado, para que me declares lo que tengo que hacer. Entonces Samuel dijo: ¿Y para que me preguntas a mi, si Jehová se ha apartado de ti y es tu enemigo?».

    Para emitir nuestra opinión sobre este debatido asunto, señalaremos algunos antecedentes.

    Primero, la necromancia o la adivinación por medio de muertos es condenada por Dios en su Palabra. Deuteronomio 18:10-11 dice: «No sea hallado en ti quien haga pasar a su hijo o a su hija por el fuego, ni quien practique adivinación, ni agorero, ni sortílego, ni hechicero, ni encantador, ni adivino, ni mago, ni quien consulte a los muertos».

    Segundo, Saúl se encontraba presa del pánico a causa de la superioridad militar de los filisteos contra quienes estaba por entrar en batalla. 1ª Samuel 28:5 dice: «Y cuando vio Saúl el campamento de los filisteos, tuvo miedo, y se turbo su corazón en gran manera».

    Tercero, Saúl había sido desechado por Jehová a causa de su desobediencia. Jehová decidió no comunicarse con él por los medios quo normalmente lo hacia, según lo que dice 1ª Samuel 28:6.

    Con estos antecedentes, , existen tres posibles explicaciones de lo que sucedió. La primera que todo fue un fraude bien montado por la adivina. Los que piensan así basan sus conclusiones en lo siguiente.

    Numero 1. La adivina sabia el estado de animo de Saúl y es probable que intentara algo para tranquilizarlo.

    Numero 2, la vida de la adivina estaba en peligro, porque Saúl había mandado cortar de la tierra a los adivinos. Es posible que por temor, la adivina fabricara una aparición ficticia.

    Numero 3, la adivina conocía a Samuel y lo describe sobre la base de su conocimiento y no sobre la base de algo que estaba viendo ese momento.

    Numero 4. Saúl no vio a Samuel porque estaba postrado en tierra. Quizás imagino que era Samuel quien hablaba, pero en realidad era la misma adivina o un cómplice.

    La segunda posible explicación es que se trataba de un espíritu malo o el mismo Satanás quien apareció disfrazado de Samuel. Aquellos que sostienen esta explicación basan su razonamiento en lo siguiente:

    Numero 1, Saúl toco las puertas del cielo para buscar consejo, pero Dios había decidido no responderle. Como la puerta del cielo no se abrió, Saúl fue a tocar la puerta del infierno, y Satanás o sus demonios le atendieron con gusto.

    Numero dos, Los adivinos tienen poderes satánicos, por eso su practica fue prohibida por la ley de Dios. Tuvo que haber sido Satanás o un demonio quien se presto a colaborar con la adivina.

    Numero 3, Saúl estaba en pecado y añadió pecado al pecado cuando recurrió a una adivina. Solamente Satanás pudo satisfacer el deseo de un coraz6n desobediente a Dios.

    La tercera explicación posible es que por permiso de Dios, fue verdaderamente Samuel quien retorno del mas allá para entregar un mensaje a Saúl. Los que sostienen esta posición se fundamentan en lo siguiente.

    Numero uno, la aparición ocurrió antes que la adivina pusiera en juego sus artes mágicas.

    Numero dos, la misma adivina se asuste con la aparición, reconociendo que era algo que ella no lo esperaba y que nunca antes había acontecido.

    Numero 3, Por el mensaje profético que fue entregado a Saúl, el cual se cumplió totalmente.

    Cada una de estas tres posibles explicaciones tiene sus puntos a favor y sus puntos en contra y entre los interpretes bíblicos no hay consenso sobre este asunto.

    A nosotros nos parece que la tercera explicación es la que presenta menos dificultades, de modo que sin ser dogmáticos nos parece que Dios permitió que el fallecido Samuel aparezca a Saúl para dejarle un mensaje de juicio, el cual se cumplió totalmente.

  • Mateo 10:23

    ¿A que se refería el Señor cuando en Mateo 10:23 dijo: No acabareis de recorrer todas las ciudades de Israel, antes que venga el Hijo del Hombre?.

    En relación con su consulta, comencemos por dar lectura al texto que se encuentra en Mateo 10:23 donde dice: «Cuando os persigan en esta ciudad, huid a la otra; porque de cierto os digo, que no acabareis de recorrer todas las ciudades de Israel, antes que venga el Hijo del Hombre».

    En Mateo 10, el Señor Jesucristo escogió a doce discípulos y les dio autoridad sobre los espíritus inmundos y sobre toda enfermedad. Luego les envió dándoles instrucciones de no ir a los gentiles ni samaritanos, sino a las ovejas perdidas de la casa de Israel. Su misión era anunciar que el reino de los cielos se ha acercado. Las sanidades y demás hechos milagrosos eran las señales que autenticaban que tanto los mensajeros como el mensaje provenían de Dios.

    Ahora bien, permítame señalar que en algunos pasajes bíblicos que tratan sobre cosas que van a acontecer en el futuro, en lo que la Biblia llama profecías, el Espíritu de Dios a menudo anuncia algo sobre el futuro cercano con algo sobre el futuro lejano, sin mediar explicación alguna. De esta manera, ciertas profecías pueden tener un cumplimiento parcial en un tiempo cercano y un cumplimiento total en un tiempo lejano.

    Por ejemplo, las dos venidas de Cristo pueden estar inmersas en un solo pasaje, sin ninguna aparente explicación. Un caso así vemos en Isaías 52:14-15 donde leemos: «Como se asombraron de ti muchos, de tal manera fue desfigurado de los hombres su parecer, y su hermosura mas que la de los hijos de los hombres, así asombrara él a muchas naciones; los reyes cerraran ante él la boca, porque verán lo que nunca les fue contado, y entenderán lo que jamás hablan oído».

    En el versículo 14 tenemos los eventos que debían cumplirse en el tiempo cercano, y ciertamente se cumplieron en la primera venida de Cristo. Pero en el versículo 15 tenemos eventos que todavía no se han cumplido y que deberán cumplirse en el tiempo lejano, a saber, en la segunda venida de Cristo.

    Algo similar a esto tonemos en Mateo 10:23. En la primera parte del texto, el Señor predice el sufrimiento y la persecución que iban a sufrir sus doce discípulos y les instruye que cuando les persigan en cierta ciudad no se queden allí sino que huyan a otra ciudad.

    En la segunda parte del texto, el Señor se proyecta al futuro lejano, al tiempo cuando sea eminente su segunda venida. Les dice: «Porque de cierto os digo, que no acabareis de recorrer todas las ciudades de Israel, antes que venga el Hijo del Hombre».

    Esta declaración no puede de ninguna manera referirse a la misión de los doce discípulos, porque el Hijo del Hombre ya había venido y estaba entre ellos. Si no puede referirse a la primera venida de Cristo, entonces debe referirse a su segunda venida, y en realidad es así. Durante la gran Tribulación, los 144.000 testigos judíos saldrán a predicar el evangelio del reino. Estos testigos serán perseguidos y aborrecidos. Antes que prediquen este evangelio del reino en todas las ciudades de Israel, retornara el Señor Jesucristo, para juzgar a sus enemigos y establecer su reino milenial.

  • Apocalipsis 2 y 3

    Mi pregunta tiene que ver con las siete iglesias que se mencionan en Apocalipsis capítulos 2 y 3. ¿Existe algún simbolismo en cuanto a las etapas de la iglesia cristiana a lo largo de esta dispensación?. Si existe. ¿A que iglesia corresponde la época en la cual vivimos en la actualidad?.

    Con relación a su consulta, es necesario señalar que mucho del lenguaje de Apocalipsis es simbólico. Allí se habla de números, colores, minerales, joyas, animales, estrellas, candeleros, etc. Y cada una de estas cosas representa personas, cosas, o verdades.

    Por ejemplo, notemos lo que dice Apocalipsis 1:20 donde leemos: «El misterio de las siete estrellas que has visto en mi diestra, y de tos siete candeleros de oro: Las siete estrellas son los Ángeles de las siete iglesias y los siete candeleros que has visto son las siete iglesias».

    Juan vio en visión siete candeleros de oro y en medio de los siete candeleros a uno semejante al Hijo del Hombre que tenia en su diestra siete estrellas. Tanto los candeleros de oro como las estrellas son símbolos y el mismo libro de Apocalipsis nos da el significado.

    Las siete estrellas representan a los ángeles de las siete iglesias y los siete candeleros representan a las siete iglesias. De modo que, no seria extraño que cada una de las iglesias en los capítulos 2 y 3 tengan también un significado simbólico, además del significado literal que ciertamente tienen.

    Habiendo hecho esta aclaración, continuaremos diciendo que en los capítulos 2 y 3 de Apocalipsis tenemos cartas individuales dirigidas a siete iglesias locales ubicadas en lo que se llamaba Asia. Estas cartas pueden hallar aplicación en al menos tres diferentes maneras.

    La primera, partiendo de una interpretación literal, las cartas describen las condiciones que existían en la realidad en las siete iglesias locales, durante el tiempo que Juan estaba escribiendo el Apocalipsis.

    La segunda manera de aplicar, es que las cartas a siete iglesias nos dan una vista del Cristianismo en la tierra en cualquier momento de su historia. Con esto queremos decir que en cada instante de la historia de la iglesia han existido en mayor o menor grado todas y cada una de las características de las 7 iglesias de Asia.

    Partiendo de esta manera de aplicación podemos afirmar entonces que hoy en día existen iglesias locales semejantes a la iglesia de Efeso, en las cuales se perdió el primer amor.

    Existen iglesias locales semejantes a la iglesia de Esmirna, en las cuales se experimenta el fuego ardiente de la persecución.

    Hay iglesias locales parecidas a la iglesia de Pergamo, en las cuales el Gobierno de los países y las iglesias hacen sus compromisos solemnes de cooperación mutua.

    Existen iglesias parecidas a Tiatira, en las cuales se tolera falsa doctrina con la consecuencia inevitable de falta de santidad en sus miembros.

    Existen iglesias locales parecidas a la iglesia de Sardis, en las cuales no existe sino mera formalidad, mundanalidad y política.

    Existen también iglesias semejantes a la de Filadelfia, en las cuales hay un despertar por alcanzar a los perdidos con el evangelio de Cristo.

    Existen también iglesias parecidas a la de Laodicea, caracterizadas por una tibieza enfermiza y con tendencia a abandonar la fe e ir tras la liberalidad y el ecumenismo.

    La tercera manera de aplicar las cartas a las siete iglesias, es asumir que cada iglesia describe las condiciones de siete distintas épocas del cristianismo.

    Viéndolo de esta manera, notaremos que existe una tendencia generalizada hacia la degradación en las iglesias. Algunos estudiosos de la Biblia creen que las tres primeras iglesias representan periodos consecutivos de la vida del cristianismo y que las cuatro iglesias restantes reflejan las condiciones del periodo final, antes de la venida del Señor en el aire para arrebatar a su iglesia.

    Los que miran a las iglesias como símbolos de distintas épocas del cristianismo, normalmente dividen al cristianismo de la siguiente manera:

    Efeso, representa la iglesia del primer siglo, al final de la era apostólica. Tenia cosas dignas de ser alabadas, pero nada compensaba el error garrafal de haber abandonado su primer amor.

    Esmirna, representa el periodo de las grandes persecuciones, a partir del final del primer siglo hasta el año 316 DC aproximadamente. Durante esta época, la iglesia se desangro por la furia irracional de la persecución romana.

    Pergamo, representa a la iglesia cristiana estableciéndose en el mundo bajo la égida del emperador romano Constantino. Este periodo abarco desde el año 316DC hasta el siglo quinto DC. En esta época la iglesia se vio forzada a comprometer sus convicciones para agradar al Estado. El matrimonio de la iglesia con el Estado jamás ha sido bien visto por Dios. Produce aberraciones que contradicen el verdadero propósito de la iglesia.

    Tiatira, representa el periodo comprendido entre el siglo quinto hasta el siglo decimoquinto. Por mil años aproximadamente, cayo en doctrinas y practicas totalmente reñidas con la palabra de Dios. Por la gracia y misericordia de Dios, se mantuvo siempre un remanente fiel que a pesar de la corrupción reinante supo mantenerse firme sobre la Roca que es Cristo y que eventualmente provoco lo que se llama la Reforma con Lutero a la cabeza.

    Sardis simboliza el periodo comprendido entre el siglo 16 y 17, el periodo de la pos reforma. Durante esta época, la iglesia cayo en letargo carente de realidad, con la mundanalidad que como cáncer debilitaba su fundamento. Filadelfia, representa el periodo comprendido entre los siglos 18 y 19, cuando surgieron grandes avivamientos y esfuerzos evangelisticos que dieron como resultado el envió de miles de misioneros por todo el mundo.

    Laodicea, representa a la iglesia de los últimos días, caracterizada por la tibieza y apostasía Esta es la iglesia de los grandes esfuerzos ecuménicos y la tendencia cada vez más creciente hacia la liberalidad.

    Ahora bien, cualquiera sea la interpretación que demos a esto de las iglesias, es innegable que la iglesia de Laodicea representa un cuadro vivido de a época en la cual estamos viviendo. Los bienes de lujo abundan en las manos de muchos creyentes mientras miles de almas están yendo al infierno por falta de medios económicos para llevarles el evangelio.

    Los creyentes preferimos llevar las coronas en lugar de la cruz de Cristo. Nos entusiasma mas un evento deportivo o la televisión o la política que la persona de Cristo. Casi hemos perdido la sensibilidad a lo espiritual, no añoramos un avivamiento. Damos lo mejor de nosotros a los negocios de este mundo y lo que nos sobra de tiempo, dinero y energía lo damos al Señor y aun eso con la actitud de que lo estamos haciendo un favor.

    Rodeamos a nuestros cuerpos de toda la comodidad posible a pesar que sabemos que en cuestión de unos pocos años esos cuerpos terminaran en una tumba fría. Acumulamos riqueza en lugar de renunciar a la riqueza. Amontonamos tesoros en la tierra en lugar de hacemos tesoros en el cielo. Pensamos que somos ricos y que nos hemos enriquecido y que de ninguna cosa tenemos necesidad, pero Dios nos dice: No sabes que tú eres un desventurado, miserable, pobre, ciego y desnudo.

    Oh, cuan trágico es el momento que vive el cristianismo hoy en día.

    Cuanto nos hace falta volver a la persona de Cristo para solamente en el encontrar el oro refinado en fuego para así ser ricos. Como despreciamos lo valioso y nos contentamos con la basura. Cuanto nos falta cubrirnos de la justicia de Cristo para verdaderamente envolvemos de vestiduras blancas que cubran la vergüenza de nuestra desnudez. Cuanto nos falta ungir nuestros ojos con el colirio de la pureza de Cristo para mirar las cosas como el las ve, para sentir las cosas como él las siente.

    Si, amigo oyente, hoy en día vivimos la ultima etapa del cristianismo, una etapa caracterizada por la tibieza El Señor dice por tanto. Ojalá fueses frió o caliente, pero por cuanto eres tibio y no frió ni caliente, te vomitare de mi boca.

  • Santiago 4:4

    Demos lectura al texto bíblico materia de la consulta. Se encuentra en Santiago 4:4 donde leemos: «¡Oh almas adúlteras! ¿No sabéis que la amistad del mundo es enemistad contra Dios? Cualquiera, pues, que quiera ser amigo del mundo, se constituye enemigo de Dios.»

    Este versículo es parte de un pasaje bíblico en el cual Santiago su autor confronta severamente lo que se llama mundanalidad.

    La mundanalidad es la actitud de algunos creyentes por la cual se adaptan a la manera de pensar y la conducta que es propia del mundo, El mundo en el cual no tiene cabida ni la persona ni la palabra de Dios.

    Santiago comienza su censura con una exclamación bastante fuerte y descriptiva. Dice ¡Oh almas adúlteras! Esto nos habla de lo que se da por llamar el adulterio espiritual. Lo que pasa amigo oyente es que cuando recibimos a Cristo como Salvador, hemos sido desposados con Dios, pero cuando el centro de nuestro afecto es el mundo o lo material, o las cosas que no contemplan a Dios y a su Hijo Jesucristo, entonces hemos llegado a ser infieles con él.

    Nos aterrorizamos ante la idea del adulterio en el matrimonio, pero ¿por qué no reaccionamos igual cuando estamos traicionando a Dios con quien hemos sido desposados?

    Luego Santiago prosigue afirmando que la amistad del mundo es enemistad contra Dios. Cuando Santiago habla del mundo no se está refiriendo al planeta en el cual vivimos sino al sistema que el hombre ha edificado para sí mismo en un esfuerzo para satisfacer el deseo de los ojos, el deseo de la carne, y la vanagloria de la vida.

    En este sistema no hay lugar para Dios o para su Hijo Jesucristo. El entablar amistad con este sistema es equivalente a declarar la guerra a Dios. ¿Por qué? Pues porque sencillamente al alinearnos con el mundo estamos de la mano con el sistema político, religioso, y social que llevó a su Hijo al Calvario. Fue el mundo con sus pasiones y deseos que ni de lejos reconoció a Jesús como el Mesías.

    ¿Por qué la amistad del mundo, es enemistad contra Dios? Porque es el mundo con su bien montada estructura que hoy por hoy está persiguiendo y rechazando a la Iglesia de Cristo la cual es su cuerpo.

    ¿Cómo podemos tener amistad con el mundo si su sistema mundano está continuamente causando aflicción a Jesucristo a través de su iglesia? Es por esto que Santiago agrega una advertencia crucial. «Cualquiera pues que quiera ser amigo del mundo, se constituye en enemigo de Dios»

    Esto equivale a decir: «el que no es conmigo, contra mí es»

    Conozco a muchos que dicen: Yo no soy enemigo de Dios, simplemente no quiero saber nada de él. Otros dicen: Yo no niego a Dios, ni estoy a favor de Dios. Simplemente soy neutral.

    En lo espiritual no existe terreno neutral amigo oyente. O estamos con Dios o somos enemigos de Dios. Cualquiera que va del brazo con el mundo se constituye automáticamente en un enemigo de Dios y algún día se arrepentirá por ello.

  • 1ª Timoteo 3:16

    Qué tal si damos lectura al pasaje bíblico que se encuentra en 1ª Timoteo 3:16 donde dice lo siguiente: «E indiscutiblemente, grande es el misterio de la piedad: Dios fue manifestado en carne, justificado en el Espíritu, visto de los ángeles, predicado a los gentiles, creído en el mundo, recibido en gloria.»

    Este texto mi querido amigo oyente tiene sus dificultades, no tanto en la interpretación sino más bien en la razón por la cual aparece allí donde está.

    Aparentemente no se ve una clara vinculación entre este texto y el resto del pasaje bíblico que le antecede y el que viene a continuación. Es así como una de las posibilidades sería que el texto expone el clímax de la verdad en cuanto a la piedad, de la cual la iglesia es columna y baluarte.

    La piedad es la virtud que inspirada por el amor de Dios se manifiesta en una tierna devoción por las cosas santas, e inspirada por el amor al prójimo se manifiesta en actos de abnegación y compasión.

    Otra posibilidad sería que este texto muestre el ejemplo de la piedad que según Pablo debe ser una parte integral de la conducta del creyente en la iglesia del Dios viviente.

    Otra posibilidad es que este texto sería simplemente una doxología con la cual el Apóstol sella su exposición sobre la manera en que deben conducirse los líderes en la casa de Dios.

    Pero yendo a la interpretación mismo del texto, cuando Pablo dice que indiscutiblemente grande es el misterio de la piedad, no está afirmando que existe algo misterioso o incomprensible en la piedad. Lo que está diciendo es que habían ciertas cosas relativas a la piedad que eran un secreto celosamente guardado en la mente de Dios hasta el momento que fueron reveladas al hombre para su conocimiento.

    Estos hechos guardados en la mente de Dios que están siendo revelados, tienen que ver con algunos factores.

    Primero, Dios fue manifestado en carne. Esto se refiere al Señor Jesucristo y en particular a la maravilla de su encarnación. La divinidad se manifestó en carne cuando el Salvador nació como un bebé en el pesebre de Belén.

    Segundo, que fue justificado en el Espíritu. Esto significa que la deidad de Cristo fue atestiguada por el Espíritu Santo tanto en su bautismo en el Jordán cuando se oyó una voz del cielo, como en su transfiguración cuando nuevamente el cielo testificó en favor de Cristo.

    Tercero, Cristo fue visto de los ángeles. El Señor Jesucristo se vio rodeado de ángeles en su nacimiento, en su tentación, en su agonía en el huerto de Getsemaní, en su resurrección y en su ascensión.

    Cuarto, Cristo fue predicado a los gentiles. Pensar en que Cristo sea predicado a los gentiles era la peor insensatez para la mayoría de judíos. Ellos pensaban que Cristo era exclusivo de los judíos. Pero prácticamente desde que comenzó la iglesia, el mensaje de Cristo fue proclamado a todo el mundo, sin distinción de raza.

    Quinto. Cristo fue creído en el mundo. Esto es consecuencia de lo anterior. En todo el mundo existen personas que han depositado su fe en Cristo para alcanzar la salvación. Obviamente no todo el mundo ha creído en Cristo, pero en todo el mundo existen creyentes en Cristo.

    Sexto. Cristo fue recibido arriba en gloria. Esto se refiere a la marcha victoriosa que Cristo emprendió de regreso a su hogar celestial una vez que culminó su obra redentora en la tierra.

    Todo esto fue desconocido por todos en determinada época de la humanidad, pero en algún momento fue revelado por Dios. Por eso es un misterio.

  • Apocalipsis16:16

    Comenzaremos a dar respuesta a esta consulta, leyendo el texto que se encuentra en Apocalipsis 16:16 donde dice: «Y los reunió en el lugar que en Hebreo se llama Armagedón»

    Para entender lo que hemos leído, es necesario hacernos algunas preguntas: La primera sería: ¿Quién o quiénes convocan esa reunión en el lugar llamado Armagedón?

    Para responder esta pregunta, tenemos que observar cuidadosamente lo que dicen los versículos 13 y 14 del mismo capítulo, donde dice lo siguiente: «Y vi salir de la boca del dragón, y de boca de la bestia, y de la boca del falso profeta, tres espíritus inmundos a manera de ranas; pues son espíritus de demonios, que hacen señales, y van a los reyes de la tierra en todo el mundo, para reunirlos a la batalla de aquel gran día del Dios Todopoderoso».

    En este pasaje bíblico vemos en acción a una trilogía satánica, formada por Satanás o el dragón, la bestia o el Anticristo y el falso profeta. En esta trilogía satánica vemos una burda imitación de lo que es la Trinidad divina. Satanás es el maestro del engaño y la falsificación. El sabe que existe una trinidad divina y por eso se ha esforzado por imitar la suya propia con el Anticristo y el falso profeta como miembros integrantes de ella.

    Juan ve en visión, que de la boca de cada uno de estos seres siniestros sale un espíritu inmundo o demonio a manera de rana. Son estos tres demonios quienes salen por el mundo haciendo señales o milagros para engañar a los reyes de las naciones de todo el mundo y reunirlos para la batalla de Armagedón.

    Incidentalmente, podemos ver aquí que los demonios tienen poderes sobrenaturales y consecuentemente están en capacidad de hacer señales milagrosas y de ese modo engañar a mucha gente en el mundo entero.

    Es por esto que debemos tener sumo cuidado cuando vemos u oímos de señales milagrosas. No todo lo que brilla es oro, así también no todas las manifestaciones de poder sobrenatural proviene de Dios. Satanás y sus demonios también pueden hacer que la gente hable en lenguas, que la gente se caiga de espaldas, que la gente cure enfermedades, que la gente levante a personas que supuestamente habían muerto, que la gente entre en un estado de éxtasis y se ría descontroladamente o cacaree como gallina, o gire frenéticamente como un trompo, o llore desconsoladamente.

    Podemos decir entonces que Satanás, el Anticristo y el falso profeta serán los artífices de esta reunión en Armagedón. La segunda pregunta que debemos hacernos es: ¿Quiénes serán los que se reúnan en Armagedón?

    Los textos leídos nos dan algo de información. Dice que serán los reyes de la tierra o los poderosos de todo el mundo. Para mayores detalles en cuanto a quienes son los que estarán reunidos en Armagedón será necesario recurrir a varios escritos proféticos, que por la falta de tiempo no podemos analizarlos en detalle.

    Lo cierto es que a Armagedón confluirán cuatro grandes potencias mundiales, las mismas que son:

    Número uno, la federación de diez naciones capitaneadas por el Anticristo, lo cual constituye la forma final del imperio romano revivido.

    Número dos, la federación del norte o Rusia y sus aliados.

    Número tres, los reyes del oriente, es decir los pueblos asiáticos de más allá del Eufrates y número cuatro, el rey del sur, o una o más potencias del norte de África.

    La tercera pregunta que debemos hacernos es: ¿Con qué propósito esta trilogía satánica reunirá a tantos líderes mundiales y sus ejércitos en Armagedón?

    La respuesta a esta pregunta la tenemos en el versículo 14 donde dice: «Para reunirlos a la batalla de aquel gran día del Dios Todopoderoso.»

    Cuando la Biblia habla de la batalla de aquel gran día, está refiriéndose en realidad a una campaña bélica y no a una sola batalla. Al examinar lo que la Biblia dice sobre esta campaña bélica encontraremos que los ejércitos del sur son destruidos en batalla, los ejércitos del norte nos heridos por el Señor, y los ejércitos del Anticristo y del Oriente son aniquilados por el Señor en su segunda venida.

    La cuarta pregunta es ¿En dónde serán reunidos los ejércitos del mundo para la batalla de aquel gran día del Dios Todopoderoso?

    Como ya se ha señalado, será en un lugar que en Hebreo se llama Armagedón. Armagedón significa: El monte de Meguido. El monte de Meguido está situado al Oeste del río Jordán, en la Palestina central a unos 16 Km. al sur de Nazaret y 24 Km. tierra adentro de la costa marítima del Mediterráneo.

    Al pie de este monte se extiende una inmensa llanura, conocida también como la llanura de Esdraelón, en la cual se han librado muchas batallas en Israel. El escritor Vincent dice sobre esto: Meguido está en la llanura de Esdraelón, el cual ha sido un lugar ideal para enfrentamientos bélicos en Palestina desde los días de Nabucodonosor rey de Babilonia hasta la campaña militar que terminó en la derrota de Napoleón Bonaparte.

    La quinta pregunta que tenemos que hacernos es: ¿Cuándo tendrá lugar la campaña militar de Armagedón? La campaña militar de Armagedón tendrá lugar al final de la tribulación, o periodo de siete años en el cual Dios derramará su ira sobre al tierra para prepararla para el reinado milenial de Cristo.

    Durante este periodo, el rey del sur será derrotado por los ejércitos del Anticristo y la confederación del norte será derrotada por el Señor sobre los montes de Israel. Quedarán por tanto las fuerzas de Oriente y las del Anticristo quienes se dispondrán a pelear entre sí. Antes de que se traben en combate, aparecerá la señal en los cielos anunciando la venida del Hijo del Hombre, el Señor Jesucristo.

    Este acontecimiento hará que las fuerzas del Anticristo y del Oriente olviden su enemistad para unir sus fuerzas y pelear contra un enemigo común para los dos, el Señor Jesucristo. El Señor Jesucristo les dará su merecido al punto que la sangre de hombres y animales llenará el valle de Esdraelón hasta una altura de la panza de los caballos.

    Resumiendo entonces, Satanás, el Anticristo y el falso profeta engañarán a los reyes de la tierra por medio de demonios capaces de hacer señales sobrenaturales y los reunirán, a ellos y sus ejércitos, para la gran batalla de aquel día contra el Dios Todopoderoso. Esta reunión será en el valle de Esdraelón al pie del monte Meguido o Armagedón en Hebreo. Este evento acontecerá al final de la tribulación, cuando el Señor Jesucristo venga por segunda vez a la tierra.

  • Apocalipsis 6:13

    ¿A qué se refiere la Biblia cuando habla de las estrellas que cayeron sobre la tierra, según Apocalipsis 6:13?

    Leamos lo que dice Apocalipsis 6:13 «Y las estrellas del cielo cayeron sobre la tierra, como la higuera deja caer sus higos cuando es sacudida por un fuerte viento.»

    Para entender este texto, debemos considerar que el libro de Apocalipsis echa mano de abundante simbología para enseñar verdades espirituales. Apocalipsis 6:13 es parte de los juicios que Dios derramará sobre este mundo durante la tribulación. Específicamente lo que se conoce como el juicio de los sellos y más directamente el sexto sello.

    Las estrellas del cielo cayendo sobre la tierra, debe entenderse en dos posibles maneras.

    Primero, como una referencia a personas de mucha influencia que caerán de sus lugares de autoridad y como consecuencia imperará el caos y la anarquía.

    Segundo puede entenderse también en el sentido que caerán sobre la tierra algunos cuerpos celestes. La palabra estrellas puede significar no solamente las distantes y relucientes estrellas sino también cualquier cuerpo celeste como los meteoritos por ejemplo.

    Así que bien puede ser una referencia a una inusual lluvia de asteroides o meteoritos.

  • Romanos 13:2

    Quiero que me expliquen el significado de Romanos 13:2

    Romanos 13:2 dice lo siguiente: «De modo que quien se opone a la autoridad, acarrean condenación para sí mismos.»

    Este texto es una ampliación de lo que el mismo escritor dijo en Romanos 13:1 donde leemos: «Sométase toda persona a las autoridades superiores; porque no hay autoridad sino de parte de Dios, y las que hay, por Dios han sido establecidas.»

    El mandato de Dios para el creyente es someterse a las autoridades superiores. La palabra someterse significa tomar el lugar que a uno le corresponde, dentro de una cadena de autoridad.

    Como buenos creyentes debemos someternos en obediencia a las autoridades que están sobre nosotros en los diversos campos de la vida, no solamente en la iglesia, sino también en el hogar, en el trabajo, en los centros educacionales, y en el país en general, llámense estos presidentes, gobernadores, alcaldes, etc.

    La razón para someterse es porque toda autoridad viene de Dios y es Dios quien pone a ciertas personas en autoridad sobre otros. ¿Querrá decir esto que por ser puestas por Dios, todas las personas puestas en autoridad son personas creyentes? ¡Qué bueno sería si así fuera!

    Pero lamentablemente no es así. La mayoría de las personas puestas por Dios en autoridad son personas incrédulas. Solo Dios sabe por qué lo hace. Dios tiene un buen propósito para ello, aunque nosotros no lo entendamos.

    Pero ¿Qué pasa si una persona resiste a cualquier autoridad? El texto lo dice claramente: Quien se opone a la autoridad, a lo establecido por Dios resiste. El rebelarse ante cualquier autoridad, no importa si es buena o mala es equivalente a rebelarse contra Dios.

    Quien resiste a cualquier autoridad está diciendo a Dios: Te equivocaste al poner a tal persona en autoridad. ¿Pero quienes somos nosotros para corregir a Dios?. Mire lo que dice Job 40:2 «¿Es sabiduría contender con el Omnipotente? El que disputa con Dios, responda esto.»

    Así es, es una necedad pedir cuentas a Dios por lo que él hace en su soberanía. Es por esto que debemos tener mucho cuidado con rechazar a cualquier autoridad. Hoy en día existe una corriente de pensamiento entre algunos evangélicos que alienta la rebelión contra las autoridades civiles del país para conseguir cambios sociales, pero ¡Cuidado! Esto va en contra de lo que dice su palabra.

    Siendo que no todas las autoridades son buenas, es muy probable que una autoridad mala demande algo que va en contra de la palabra de Dios. ¿Qué hacer en estos casos? ¿Debemos someternos a esas demandas sabiendo que van en contra de la Biblia?

    Pues, no. Si una autoridad demanda algo contrario a lo que dice la Biblia, el creyente no está en obligación de someterse a esa demanda, porque la autoridad de Dios está sobre la autoridad del ser humano.

    Cuando los líderes religiosos quisieron obligar a Pedro y los apóstoles a no predicar más en el nombre de Cristo, Pedro dijo lo que tenemos en Hechos 5:29: «Es necesario obedecer a Dios antes que a los hombres.»

    Pero volvamos al asunto de someterse a las autoridades puestas por Dios ¿cuáles son las consecuencias de rebelarse contra la autoridad? El texto en Romanos 13:2 responde diciendo: y los que resisten acarrean condenación para sí mismos. El desobedecer a una autoridad, en lo que es legítimo, por supuesto, trae por un lado la disciplina de Dios y por otro lado la sanción que impone la autoridad.