¿Cómo se debe entender la palabra hermanos?

Para demostrar que la virgen María nunca tuvo otros hijos, además de Jesús, se enseña que la palabra “hermanos” que aparece en Marcos 6:3 y Lucas 8:19, realmente significa parientes. En el Antiguo Testamento vemos que fue así. ¿Cómo se debe entender la palabra “hermanos” en los dos textos citados del Nuevo Testamento?

La palabra “hermano” no sólo en el Antiguo Testamento, sino también en el Nuevo Testamento tiene un significado bastante amplio, de modo que es de vital importancia examinar el contexto para saber el significado preciso de esta palabra. La palabra hermano se usa para los hijos varones de los mismos padres, o los descendientes varones de los mismos padres, o los hijos varones de la misma madre, o personas de la misma nacionalidad, o cualquier hombre o un vecino, o personas unidas en un interés común o personas unidas por una común vocación, o la humanidad, o los creyentes con abstracción de su sexo. Como notará, amable oyente, la palabra “hermano” tiene un uso bastante amplio y para determinar el significado preciso en cada caso es necesario poner mucha atención al contexto. Esta amplitud de significado de la palabra “hermano” ha sido bien aprovechada por aquellos que tratan de defender la eterna virginidad de María, negando frontalmente que hubiera tenido hijos con José, su legítimo esposo. Pero el hecho que María tuvo más hijos, además de Jesús, se demuestra, no sólo porque el Nuevo Testamento habla de la presencia física de los hermanos de Jesús, junto a él y a María, sino porque eso es lo que dice Lucas 2:7 donde hablando de María dice lo siguiente: “Y dio a luz a su hijo primogénito, y lo envolvió en pañales, y lo acostó en un pesebre, porque no había lugar para ellos en el mesón” Jesús fue el hijo primogénito de María. Primogénito en este caso significa el primero de varios, esto obliga a deducir que María tuvo varios hijos más, además de Jesús. Por otro lado, note lo que Mateo dice acerca de José, una vez que supo que María, la virgen con quien se había desposado, había concebido del Espíritu Santo. Leo en Mateo 1:25 “Pero no la conoció hasta que dio a luz a su hijo primogénito; y le puso por nombre Jesús.” Conocer, en este versículo, significa tener relaciones sexuales. El texto no está diciendo que José nunca conoció o tuvo relaciones sexuales con María, sino que José esperó que María dé a luz a su hijo primogénito Jesús, y después la conoció o tuvo relaciones sexuales con ella, porque era su legítima esposa, y como resultado, María concibió varias veces. El estado matrimonial de ninguna manera es menos santo que el estado de virginidad, de modo que María no es menos ni más que lo que es a los ojos de Dios por el hecho de haberse casado con José y de haber tenido hijos con él. Además, el Nuevo Testamento habla de los hermanos de Jesús, en siete pasajes diferentes, y en ninguno de estos pasajes existe la más mínima duda en cuanto a que la palabra hermanos o hermanas se refiere a los otros hijos de María. Estos textos bíblicos son: Juan 2:12; Mateo 12:46 con Marcos 3:31 y Lucas 8:19; Mateo 13:55,56 con Marcos 6:3; Juan 7:3-5, 10; Hechos 1:14; 1 Corintios 9:5; y Gálatas 1:19. Es interesante que en el Nuevo Testamento se hace una clara distinción entre hermanos y parientes por medio del uso de dos palabras diferentes. Por ejemplo, note lo que dice Lucas 1:36 “Y he aquí tu parienta Elisabet, ella también ha concebido en su vejez; y este es el sexto mes para ella, la que llamaban estéril”  Inclusive Elisabet tenía otros parientes, y sobre eso nos habla Lucas 1:58 donde dice: “Y cuando oyeron los vecinos y los parientes que Dios había engrandecido para con ella su misericordia, se regocijaron con ella.” Cuando el Nuevo Testamento habla de hermano o hermana, utiliza la palabra “adelphós”, pero al hablar de pariente o parienta, utiliza la palabra “sungenés” que denota primariamente vinculación de parentesco. Es decir, que no es que no existe una palabra griega para pariente y por eso el Nuevo Testamento tiene que usar la palabra griega para hermano, para referirse a los parientes de Jesús. En Lucas 21:16 aparece una lista de parentescos, y ciertamente entre ellos están, los hermanos y parientes, ratificando que cuanto el Nuevo Testamento quiere hablar de parientes usa la palabra “sungenés” y cuando quiere hablar de hermanos, usa la palabra “adelphós” En todos los casos cuando el Nuevo Testamento habla de los hermanos de Jesús, se usa la palabra griega “adelphós”, jamás la palabra griega “sungenés” dando a entender que efectivamente se trataba de otros hijos de María. Lucas 21:16 dice: “Mas seréis entregados aun por vuestros padres, y hermanos, y parientes, y amigos; y matarán a algunos de vosotros.” Por todo lo expuesto, fuera de toda duda, el Nuevo Testamento testifica que María tuvo otros hijos además de Jesús.