A pesar de ser creyente, mi esposo me ofende con frecuencia. No físicamente pero sí emocionalmente. Me humilla, me ignora, es grosero conmigo y me hace quedar mal delante de nuestros amigos. He hablado con él acerca de esto, y él ha reconocido que ha actuado mal. Me ha pedido perdón y yo le he perdonado. Pero el problema es que él sigue haciendo lo mismo. Mi pregunta es ¿Hasta cuándo debo soportar este trato? ¿Debo seguir perdonando a mi esposo sabiendo que va a volver a hacer lo mismo otra vez?
Bueno, lo que dijimos al responder la consulta anterior tiene total aplicación para su caso. En especial lo que tiene que ver con la extensión del perdón. Recuerde que nuestra forma de perdonar debe ser siguiendo el modelo de Dios al perdonarnos a nosotros en Cristo. Dios nos perdonó sin condiciones y Dios nos perdonó de algo tan grave que demandó la muerte de su propio Hijo para poder perdonarnos. Así debe ser también su perdón amiga oyente.
Pero su consulta apunta al número de veces que debemos perdonar. En el Nuevo Testamento hubo un hombre que tenía la misma duda que Usted. Este hombre tenía a su lado a Jesús.
De modo que hizo a Jesús esa pregunta. Veamos como la respondió Jesús. La historia se relata en Mateo 18:21-22 donde dice: “Entonces se le acercó Pedro y le dijo: Señor, ¿cuántas veces perdonaré a mi hermano que peque contra mí? ¿Hasta siete? Jesús le dijo: No te digo hasta siete, sino aun hasta setenta veces siete.”
Basándose en lo que se encuentra en Amós capítulo 1 donde por varias ocasiones aparecen frases como: Por tres pecados de tal y tal y por el cuarto, no revocaré su castigo, los rabinos de la época de Jesús enseñaban a la gente que se debe perdonar hasta tres veces la falta cometida por una persona, pero si esa persona comete la misma falta una cuarta vez, ya no se debe perdonar.
Bueno, Pedro, quiso aparentar ser más generoso y pensó que se debería perdonar hasta siete veces a un hermano que peque contra él. Seguramente Pedro esperaba que Jesús le felicite por su generosidad, pero Jesús corrigió la forma de pensar de Pedro diciéndole: No te digo hasta siete, sino aun hasta setenta veces siete.
Esto no significa que debemos perdonar a la misma persona que nos ofende hasta 490 veces, porque setenta por siete es 490. Lo que está diciendo Jesús es que debemos perdonar las veces que sean necesarias, sin ningún límite. Esto queda corroborado por lo que dice Lucas 17:4 donde leemos: “Y si siete veces al día pecare contra ti, y siete veces al día volviere a ti, diciendo: Me arrepiento; perdónale.”
El perdón es sin límite amiga oyente, porque así es como nos perdona Dios a nosotros en Cristo. ¿Qué le parecería si Dios nos hubiera dicho: Te perdono de todo lo malo que hasta aquí has hecho, pero no vuelvas a hacer nada de malo, porque si lo vuelves a hacer ya no te perdonaré más?
Si fuera así, ninguno de nosotros podría sentirse realmente perdonado. De modo que, amiga oyente. Perdone a su esposo las veces que sean necesarias. Hable con él con tino y en amor para motivarle a no repetir esa conducta impropia. Si es posible busque algún tipo de ayuda de los ancianos o pastores de su iglesia. Y dispóngase a perdonar las veces que sean necesarias.