Ahora veamos el tercer día, Dios crea la tierra y la vegetación, mira el verso 9, “Dijo también Dios: «Reúnanse las aguas que están debajo de los cielos en un solo lugar, para que se descubra lo seco.»” “Y fue así” esta última expresión significa “Dios lo hizo” “Dios creó”
Dios creó los cielos y la tierra durante estos seis días de 24 horas. Hay otros que piensan que sólo es un periodo de tiempo, no necesariamente determinado. No estoy hablando de lo que se denomina la “evolución teísta” Dios crea un principio y luego las cosas “evolucionan” no creo en esto en absoluto, pero, incluso aquellos que creen en esto sostienen que existe un periodo de tiempo y que Dios es el creador de todas las cosas.
Así que, de cualquier manera, voy a proponer que este periodo de tiempo es de 24 horas, porque en realidad el asunto es más importante que esto, el tema es que Dios está directamente implicado en este proceso creativo, Él es el creador, no hay otro
Dios ha establecido su orden, “Y fue así” “A la parte seca llamó Dios «tierra», y al conjunto de las aguas lo llamó «mares». Y vio Dios que era bueno” (Génesis 1:10) la tierra se levanta desde las profundidades oceánicas, ahora Dios le pone limite a los mares. Él delimita las aguas, los mares, demostrando una vez más su gran poder.
En los días en los que fue escrito este libro, los israelitas habían sabido de muchos dioses de las aguas y de los mares, mas es Dios mismo quien pone fronteras a estos, mira Salmos 104, versos 5 al 9, esta es una manera poética de expresar lo que Dios ha estado haciendo, el salmista dice: “Él fundó la tierra sobre sus cimientos; no será jamás removida. Con el abismo, como con vestido, [el velo] la cubriste; sobre los montes estaban las aguas. A tu reprensión huyeron; al sonido de tu trueno se apresuraron; subieron los montes, descendieron los valles al lugar que tú les fijaste. Les pusiste un límite, [hablando de las aguas] el cual no traspasarán, ni volverán a cubrir la tierra” Dios crea la tierra y los mares, esto es el día tres.
Ahora mira el verso 11: “Después dijo Dios: «Produzca la tierra hierba verde, hierba que dé semilla; árbol que dé fruto según su especie, cuya semilla esté en él, sobre la tierra.» Y fue así. Produjo, pues, la tierra hierba verde, hierba que da semilla según su naturaleza, y árbol que da fruto, cuya semilla está en él, según su especie. Y vio Dios que era bueno” (Génesis 1:11 y 12) Dios ha creado todo, TODO, aun lo que está dentro de los árboles, sus procesos internos, todo, y déjame decirte algo: Dios se divertía haciendo esto, “Yo soy Dios, no hay otro” aquí están los primeros tres días.
Ahora, aquí vienen los tres días siguientes, Dios empieza a llenar la tierra, ¿recuerdas que Dios dijo; sea la luz? Bien, como dijimos, el primer día corresponde y concuerda con el cuarto día, Dios va a empezar a llenar la tierra.
Dios ha remediado la vacuidad durante estos tres primeros días, en el cuarto día tenemos luces para el día y luces para la noche, mira el verso 14, “Dijo luego Dios: «Haya lumbreras en el firmamento de los cielos para separar el día de la noche, que sirvan de señales para las estaciones, los días y los años, y sean por lumbreras en el firmamento celeste para alumbrar sobre la tierra.» Y fue así” (Génesis 1:14 y 15). Así es como funciona esto, “Y fue así” “fue establecido”
“E hizo Dios las dos grandes lumbreras: la lumbrera mayor para que señoreara en el día, y la lumbrera menor para que señoreara en la noche; e hizo también las estrellas” (Génesis 1:16) Me encanta pensar en esto: Dios hizo el sol la luna y las estrellas, pero, piensa en esto, nuestro sol es una estrella tan potente como para quemarnos la piel, pero es en realidad muy pequeño comparado con otras estrellas.
Tomemos como ejemplo la estrella Antares, esta estrella es gigantesca y está a 500 años luz de distancia. Antares es 10.000 veces más grande que el sol, así de grande es. Ahora, Antares y el sol sólo son dos de quinientos millones de estrellas de la Vía Láctea. Se dice que si tú pones un centavo frente a tus ojos estarías bloqueando 15 millones de estrellas. La galaxia Andrómeda está lo suficientemente cerca para que la podamos contemplar con nuestros propios ojos.
Los gráficos que conocemos sólo nos muestran dos millones de años luz de distancia, y Andrómeda tiene alrededor de un billón de estrellas, ¿Puedes entender esto? Y solo es una de dos millones de galaxias en el universo. La mayoría de nosotros tenemos a Dios metido en una caja, nuestra mente es demasiado pequeña para contenerlo.
Génesis 1:1 dice que nuestro Dios no es un Dios pequeño, Él está más allá de nuestra comprensión, más allá de la capacidad de nuestro cerebro para entender su grandeza. Éste es nuestro gran Dios, aquel que nos amó tanto que el mismo envió a un pequeño bebé, a su hijo, a nacer en esta tierra y a morir en una cruz por nuestros pecados. Si tan sólo pudiéramos asimilar Génesis 1 nunca más volveríamos a mirar hacia atrás, porque aun cuando este Dios es tan grande, nosotros le importamos mucho. Él tiene grandes planes para nosotros, Él tiene grandes planes para ti, Él tiene sólo cosas buenas para ti. El Nuevo Testamento dice que ni siquiera podemos pensar o imaginar las cosas que Dios ha preparado para nosotros, debemos tener un concepto más elevado de quién es Dios, tenemos que entender su magnitud, llegar a comprender que este es el Dios al que servimos, este es nuestro Dios, un Dios sorprendente.
En el quinto día Dios crea la vida en el mar y en el cielo, ¿Recuerdas el día dos? Dios creo el cielo, ahora en el día correspondiente va a crear pájaros y animales. Veamos el verso 20: “Dijo Dios: «Produzcan las aguas seres vivientes, y aves que vuelen sobre la tierra, en el firmamento de los cielos.» Y creó Dios los grandes monstruos marinos y todo ser viviente que se mueve, que las aguas produjeron según su especie, y toda ave alada según su especie. Y vio Dios que era bueno. Y los bendijo Dios, diciendo: «Fructificad y multiplicaos, llenad las aguas en los mares y multiplíquense las aves en la tierra.» Y fue la tarde y la mañana del quinto día” (Génesis 1:20-23)
Ahora, un día más, el sexto día que corresponde al tercer día. Ahora va a crear vida sobre la tierra, Dios le dio forma a lo que estaba sin forma, puso luz en medio de la oscuridad, ahora va a llenar esta tierra, Dios va a crear animales y también va a formar al hombre, se lo menciona aquí en el verso 27, “Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó” Mas adelante en el capítulo 2 profundizaremos en esto; que es lo que parece y que es lo que en realidad significa, algo más, el capítulo 2 verso 1 al 3 dice, “Fueron, pues, acabados los cielos y la tierra, y todo lo que hay en ellos. El séptimo día concluyó Dios la obra que hizo, y reposó el séptimo día de todo cuanto había hecho. Entonces bendijo Dios el séptimo día y lo santificó, porque en él reposó de toda la obra que había hecho en la creación”
El “Sabbat” frecuentemente escrito también “Shabat” (en hebreo: “shabbath” “cesar”) nosotros lo conocemos como sábado, esto no significa que Dios estaba cansado y necesitaba tomarse un descanso, el “Shabat” simboliza la celebración de la finalización, el gozo de la culminación de lo creado, Dios celebra la finalización de su creación.
Dios dijo, cada vez de crear algo, que su creación era “buena” ¿sabes que dijo después del sexto día? Dios dijo que su creación era “muy buena”
Dos lecciones que aprendemos desde Génesis 1:1 hasta 2:3, en este programa veremos la primera de ellas. Empecemos, lo primero; Moisés quiere dejar algo muy en claro, Israel acaba de salir de una tierra llena de dioses, pero Moisés le dice al pueblo, “¡eso se acabó! ¡No más de eso! Dios es el único Dios, Dios soberano, Dios Todopoderoso, Dios autentico, Dios Altísimo, no hay otro como Él, a este Dios le debemos nuestra lealtad”
A este Dios es al que le debemos nuestra obediencia. De hecho, ese es el primer mandamiento, Dios le dijo a Moisés: “no tendrás otros dioses delante de mí” Empecemos por ahí, no podemos tener otros dioses en nuestra vida, Dios demanda atención sólo para Él, Dios es único y al único a quién vale la pena servir, dice Dios: “Yo soy el creador de todas las cosas” no podemos contener a Dios en una caja.
La naturaleza misma obedeció a la palabra de Dios, Dios dijo: “hágase la luz y fue la luz” Romanos capítulo 1 habla de los atributos invisibles de Dios, su eterno poder, su naturaleza divina, podemos verlo claramente desde la creación del mundo, tú puedes estar en el rincón más apartado, en el sitio más profundo, aun cuando no tuvieras una Biblia, aún si no tuvieras con quién compartir el evangelio, puedes mirar hacia el cielo y contemplar la increíble creación de Dios, tu mente y tú corazón se preguntarán, ¿quién pudo haber creado esto? Romanos dice: “Porque el anhelo ardiente de la creación es el aguardar la manifestación de los hijos de Dios”
La creación de Dios es algo asombroso, el Salmo 19 dice: “los cielos cuentan la Gloria de Dios” nosotros podemos encontrar cada noche en el cielo la Gloria de Dios, alabar a Dios por lo que Él ha hecho, permitir que este Dios creador sea el Dios de nuestras vidas. Por cierto, ¿Cuáles son los dioses con los que el Dios verdadero está compitiendo en tu vida? quizás alguna persona se ha convertido en tu Dios, adoras a esta persona, sigues a esta persona, quizás un trabajo se ha convertido en tu Dios, te despiertas pensando en él y te acuestas pensando en tu trabajo, te está consumiendo, este trabajo se ha convertido en tu Dios, tal vez un hobby se ha convertido en tu Dios, tal vez el dinero se ha convertido en tu Dios, Jesús habló al respecto ¿recuerdas? Jesús dijo en el Nuevo Testamento, “no se puede servir a Dios y a las riquezas”
El dinero es algo importante y nos gusta tener cosas importantes, nos gusta que la gente sepa dónde vivimos, de qué manera vivimos, hasta donde hemos llegado, el dinero representa seguridad y nos gusta estar seguros de que tenemos a nuestro propio dios, nos gusta asegurarnos de que estamos seguros, ¿Qué raro verdad? el dinero hace que seamos aceptados en los círculos de esta sociedad, este Dios está a nuestro alcance, lo tenemos en nuestro bolsillo, nos gusta poder ser aceptados gracias a nuestro pequeño dios.
¿El dinero es tu dios? si es así, permíteme decirte que no puede seguir siéndolo, estás sirviendo a una deidad pagana. Mira, podemos leer todo sobre los dioses del sol y los dioses de la luna y podemos decir ¿qué era lo que estas personas estaban pensando? y hacer exactamente lo mismo cuando servimos al todopoderoso dólar, y por supuesto, sabemos que el dinero es una tentación en nuestra vida, muchos están más allá de esta tentación, otros estamos haciendo todo lo posible por evitar que esto nos gobierne pues deseamos servir al Dios creador.
Dios es el “Elohim” es el Dios del Génesis 1, no podemos ponerlo en nuestro bolsillo, no podemos poner el dinero por encima de Él, un trabajo por encima de Él o a una persona por encima de Él, Dios no va a permitirlo, algunas personas se preguntan ¿por qué sus matrimonios están cayéndose a pedazos? ¿Por qué se siente tan rancio su caminar con Cristo? Bueno pues, la respuesta es sencilla, es porque están sirviendo a otros dioses y no al Dios verdadero. Génesis 1 nos dice: “tienes que cambiar esto” no puedes poner a otro Dios delante de mí.
Aquí está la segunda lección de este libro de Génesis, “Dios no ha dejado de crear en su creación”pero de eso hablaremos en nuestro próximo programa, esperamos que puedas acompañarnos y conoces juntos más sobre el maravilloso amor del creador de todo. Que Dios te bendiga.
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