¿Cuál es el origen del raptocentrismo, y de dónde es tomado en la Biblia? ¿Qué implicaciones negativas ha tenido para la pastoral latinoamericana lleno de miseria y de pobreza, principalmente en las comunidades cristianas donde se les alienta enseñándoles a pensar únicamente en las cosas de arriba, las del cielo? ¿Dónde queda Platón y su mundo de las ideas en todo esto?
¿De dónde parte la doctrina del rapto? Pues parte de una interpretación conocida como gramática, histórica y literal. Gramática porque da la importancia a los accidentes gramaticales. En el caso de los verbos, su conjugación, el tiempo, el modo y la voz. En el caso de los sustantivos, su número, su género, su caso, etc. Histórica porque toma en cuenta el contexto histórico del texto bíblico. Y literal porque asigna a las palabras el significado que tienen en su uso normal. La teología que ignora cosas como el rapto por ejemplo, parte de una interpretación alegórica de la Biblia. Esto significa dar a las palabras un sentido diferente al que tienen en el uso normal. Si yo interpretara la Biblia en un sentido alegórico, llegaría a conclusiones que muchos teólogos han llegado, como que el relato del Génesis es algo mitológico, como que no existe el cielo, como que no existe el milenio, como que no existe un lago de fuego y tantas otras cosas más. Hablando exclusivamente del rapto, una interpretación gramática, histórica y literal, de pasajes bíblicos como 1 Tesalonicenses 4:13-18 inevitablemente va a resultar en entender que está cercano el día cuando Jesucristo va a venir a las nubes para arrebatar o raptar a su iglesia. El significado del verbo griego que se ha traducido como “arrebatar”, el verbo “jarpazo” no “raspazo” como dice Usted, literalmente significa: raptar o tomar por fuerza, no el significado alegórico que Usted le ha dado. Se comenta que la doctrina del rapto de la iglesia ha hecho mucho daño al evangelio. A decir verdad, yo no veo en absoluto que una doctrina así pueda hacer daño alguno al evangelio. Todo lo contrario, veo que ha hecho mucho bien al evangelio, porque hablando del rapto de la iglesia, 1 Tesalonicenses 4:18 dice textualmente: “Por tanto, alentaos los unos a los otros con estas palabras” Lo que según la Biblia trae ánimo, aliento a los creyentes, Usted está diciendo que les ha hecho mucho daño. Según Usted no encuentra ningún pasaje bíblico que enseñe que el creyente va al cielo. Quizá deba leer 2 Corintios 5:1 donde dice: “Porque sabemos que si nuestra morada terrestre, este tabernáculo, se deshiciere, tenemos de Dios un edificio, una casa no hecha de manos, eterna, en los cielos” Este es uno de los muchos textos en los cuales la Biblia habla de que a los creyentes nos espera el cielo después de la muerte física o después del rapto. La Biblia en ninguna manera alienta la forma de pensar, que busque incomodar el tema de que como nos espera el rapto y nos espera el cielo, entonces mientras estamos en el mundo podemos vivir como quiera. La Biblia presenta un perfecto equilibrio. Mi destino eterno es el cielo, mientras estoy en la tierra, soy un embajador de Dios y por tanto debo procurar vivir de acuerdo con lo que soy. Esto me motiva a superarme en todo sentido, confiando en el poder de Dios. Si Usted nota que los creyentes sólo piensan en el cielo y no les importa como viven en la tierra, esto no es culpa de Dios o de la Biblia sino de los mismos creyentes que no viven de acuerdo a lo que son, o tal vez de algunos de sus maestros que no les han enseñado a vivir como hijos del Rey.