Teniendo en cuenta que la profecía que aparece en Mateo 24:9 se cumplió cuando los creyentes fueron perseguidos por la Inquisición de la Iglesia Católico Romana, ¿será que los creyentes ya no van a padecer más persecución en este mundo? Pero la Biblia dice que el que pierda su vida la hallará y además el Anticristo perseguirá a los creyentes en el futuro.
Cuando uno estudia las profecías en la Biblia, debe tomar en cuenta algunos principios importantes, entre los cuales está la ley del doble cumplimiento. Esto significa que algunas profecías tienen un cumplimiento parcial en el tiempo cercano y un cumplimiento final en el tiempo lejano, sin establecer cuán distante en tiempo está el cumplimiento cercano del cumplimiento lejano.
Existen profecías en la Biblia que tuvieron un cumplimiento cercano en la primera venida de Cristo, pero esperan todavía un cumplimiento lejano cuando Cristo venga por segunda vez a la tierra.
Con esto en mente, permítame hacer una introducción indispensable a la profecía que aparece en Mateo capítulo 24. Para esto, permítame leer los primeros tres versículos de este capítulo. Dice así: «Cuando Jesús salió del templo y se iba, se acercaron sus discípulos para mostrarle los edificios del templo. Respondiendo él, les dijo: ¿Veis todo esto? De cierto os digo, que no quedará aquí piedra sobre piedra, que no sea derribada. Y estando él sentado en el monte de los Olivos, los discípulos se le acercaron aparte, diciendo: Dinos, ¿cuándo serán estas cosas, y qué señal habrá de tu venida, y del fin del siglo?»
Los discípulos tenían tres preguntas en su mente.
La primera: ¿Cuándo se cumplirá la profecía de la destrucción del templo de Jerusalén?
La segunda: ¿Qué señal habrá de la segunda venida de Cristo?
La tercera: ¿Qué señal habrá del fin del siglo?
La respuesta a la primera pregunta no aparece en este evangelio sino en el evangelio de Lucas capítulo 21 versículos 20-24.
La segunda y la tercera preguntas son respondidas en los versículos 4-44 del capítulo 24 de Mateo.
La segunda pregunta es respondida en los versículos 29 a 44.
La tercera pregunta es respondida en los versículos 4 a 28.
Este pasaje último describe el período de siete años de tribulación que preceden a la gloriosa segunda venida de Cristo. Los tres y medio primeros años de la tribulación se describen en los versículos 4-14 y los tres y medio años restantes de la tribulación se describen en los versículos 15 a 28.
Sobre esta base, leamos el texto citado por Usted en su consulta. Se encuentra en Mateo 24:9 y para completar la idea incluyamos el versículo 10. Dice así: «Entonces os entregarán a tribulación, y os matarán, y seréis aborrecidos de todas las gentes por causa de mi nombre. Muchos tropezarán entonces, y se entregarán unos a otros, y unos a otros se aborrecerán.»
Esto es parte del trato que recibirán los creyentes durante la primera mitad de la tribulación. Será un tiempo de tribulación llegando inclusive al martirio. Los creyentes serán aborrecidos de todas las gentes por el solo hecho de confesar el nombre de Cristo.
El libro de Apocalipsis da los detalles en cuanto a la manera como el mundo va a someter a tribulación a los creyentes en este tiempo. Por órdenes del Anticristo, el falso profeta emprenderá la misión de marcar a todos los seguidores del Anticristo con el número 666 en la mano derecha o en la frente. Los que no tengan esta marca, es decir los creyentes, no podrán comprar ni vender. Es decir estarán condenados a un lento pero inexorable exterminio. Solo la misericordia de Dios por medio de la segunda venida de Cristo impedirá que todos los creyentes sean exterminados durante la tribulación.
Volviendo a la profecía en Mateo, vemos que muchos tropezarán. Esto significa que no recibirán a Cristo por el temor de sufrir tan severa persecución. Otros no tendrán empacho de entregar a los creyentes a las autoridades para que les maltraten o les maten. Otros manifestarán profundo odio hacia los creyentes.
Ahora bien, como ya se ha dicho, esta profecía tendrá su cumplimiento final en el futuro lejano, es decir en la tribulación, pero tuvo ya su cumplimiento cercano, y sigue teniendo, en las persecuciones que ha habido en contra de los creyentes a lo largo de la existencia de la iglesia.
Los perseguidores fueron varios, pero la perseguida fue siempre la iglesia. Entre los perseguidores está el imperio romano, la misma Inquisición como Usted bien ha señalado, los regímenes totalitarios de corte socialista o comunista, y muchas religiones antagónicas al nombre de Cristo. Pero toda la persecución a la iglesia no tiene punto de comparación con lo que será la persecución a los creyentes durante la tribulación.