Gracias por estar nuevamente con nosotros, es un privilegio contar con su sintonía, hoy continuaremos con el interesante tema que está desarrollando nuestro hermano David Logacho, “La obra de Jesucristo después de su ascensión, por medio del Espíritu Santo”, tenga su Biblia a mano y acompáñenos a conocer que es lo que dios nos quiere decir acerca de esto.
I. Introducción. Saludos y bienvenida. Estamos estudiando el libro de Hechos en la serie que se titula: La obra de Jesucristo después de su ascensión, realizada mediante el Espíritu Santo. En nuestro último estudio bíblico, vimos que la oposición incitada por los judíos de Antioquía de Pisidia e Iconio, en contra de Pablo y sus compañeros en su primer viaje misionero, logró que Pablo sea apedreado en Listra y arrojado fuera de la ciudad. Cuando los discípulos de Jesús rodearon a Pablo, se levantó y entró en Listra, pero al siguiente día salió de Listra acompañado de Bernabé con rumbo hacia Derbe. En el estudio bíblico de hoy, veremos qué es lo que pasó en Derbe, la ciudad más distante que visitaron durante el primer viaje misionero. Si tiene una Biblia a la mano, ábrala en Hechos 14 a partir del versículo 21.
II. De modo que Pablo y su equipo misionero llegaron a Derbe. Esta ciudad estaba en la provincia romana de Galacia, localizada a unos 65 km. al sur este de Listra. Veamos que nos dice Lucas. Lo primero que notamos es la comienzo del retorno del primer viaje misionero. Hechos 14:21 dice: Y después de anunciar el evangelio a aquella ciudad y de hacer muchos discípulos, volvieron a Listra, a Iconio y a Antioquía, confirmando los ánimos de los discípulos, exhortándoles a que permaneciesen en la fe, y diciéndoles: Es necesario que a través de muchas tribulaciones entremos en el reino de Dios.
Pablo y sus compañeros se dedicaron a anunciar el mensaje del Evangelio en Derbe. Pero no se limitaron sólo a la predicación del evangelio, sino que también a hacer muchos discípulos. Esto es en esencia lo que está encerrado en la gran comisión. Id y haced discípulos. Es muy triste cuando sólo se hace evangelismo y se descuida el discipulado. Esto sería equivalente a traer bebés al mundo y después abandonarlos a su suerte. Algo cruel sin duda. Igual de cruel es cuando se evangeliza y se abandona a su suerte a los bebés espirituales, a los recién nacidos en Cristo. El discipulado permite que los recién nacidos en Cristo comiencen a crecer y a desarrollar hasta llegar a un punto en el cual pueden valerse por ellos mismos y pueden multiplicarse. Una vez que Pablo y sus compañeros percibieron que Dios por medio del Espíritu Santo estaba guiándoles a terminar el ministerio en Derbe, salieron, pero cosa asombrosa, volvieron a Listra, la ciudad en la cual casi pierde la vida Pablo, después se dirigieron a Iconio, donde los judíos, los gentiles y sus gobernantes se lanzaron a afrentarlos y apedrearlos. De allí se dirigieron a Antioquía de Pisida, donde los judíos se opusieron tan violentamente a Pablo y sus compañeros. Observe que Pablo está de vuelta. Está yendo por orden a las ciudades que había visitado en la ida. Lucas dice que en cada una de estas ciudades había un grupo de discípulos, a quienes Pablo y su equipo misionero confirmaron los ánimos. ¿Sabe una cosa amable oyente? Por más maduros que pensemos que somos, siempre corremos el riesgo de desanimarnos en nuestra fe y por eso es vital el que nuestros líderes, llámense pastores o ancianos, nos animen, que confirmen nuestro ánimo. Pablo y su equipo misionero lo hicieron. Pero además, de confirmar los ánimos, Pablo y su equipo misionero hicieron otro trabajo importante. Exhortaron a los discípulos que permanezcan en la fe. Lo que pasa es que la vida para esos primeros discípulos se estaba haciendo cuesta arriba. Por su fe y su devoción al Señor Jesús estaban siendo reprimidos con mucha hostilidad. Tal vez muchos de esos discípulos habrá pensando como muchos hoy en día, esto de que: Si recibo a Cristo como mi Salvador se me van a acabar los problemas, voy a ser rico, voy a estar siempre sano y voy a ser siempre feliz, porque todos me van a querer. Pero la realidad era que desde que recibieron a Cristo como Salvador, comenzaron los problemas, la oposición, las afrentas. Esto debe haber estado causando mucha duda en esos tiernos discípulos. Por eso Pablo les exhortó, o les habló al oído, eso es lo que significa el verbo exhortar, diciéndoles: Es necesario que a través de muchas tribulaciones entremos en el reino de Dios. En segundo lugar, notamos qué es lo que hizo Pablo para que la obra continúe una vez que él se vaya. Hechos 14:23 dice: Y constituyeron ancianos en cada iglesia, y habiendo orado con ayunos, los encomendaron al Señor en quien habían creído.
Los ancianos eran creyentes maduros y piadosos que estaban en capacidad de ejercer el liderazgo espiritual en una iglesia local. En el libro de Hechos, los ancianos no fueron constituidos la primera vez que Pablo y su equipo fundaron las iglesias sino cuando volvieron a visitar esas iglesias. Esto permitía que en el intervalo, el Espíritu Santo haga manifiesto quien de los creyentes en determinada iglesia local, estaba en capacidad de ejercer el liderazgo espiritual. A estas alturas del Cristianismo, los ancianos fueron establecidos por los apóstoles, o por sus delegados. Esto se debe a que todavía no existía la enseñanza de las Epístolas pastorales para saber los requisitos que deben cumplir los creyentes en una iglesia local para que puedan ser considerados como ancianos. En la actualidad ya no existen apóstoles como Pablo, y por eso los ancianos son reconocidos en las iglesias locales por cumplir con los requisitos de carácter que aparecen en pasajes bíblicos como 1 Timoteo 3: 1-7 y Tito 1:6-9. Siempre hubo más de un anciano en cada iglesia local. Habiendo orado con ayunos, Pablo y sus compañeros, encomendaron a los ancianos al Señor en quien habían creído. En tercer lugar, encontramos el regreso de Pablo y su equipo misionero a Antioquía de Siria. Hechos 14: 24-26 dice: Pasando luego por Pisidia, vinieron a Panfilia. Y habiendo predicado la palabra en Perge, descendieron a Atalia. De allí navegaron a Antioquía, desde donde habían sido encomendados a la gracia de Dios para la obra que habían cumplido.
Pablo y sus compañeros están de regreso a la iglesia que les envió en misión. Pasaron por la región de Pisidia donde estaba la ciudad de Antioquía, luego siguieron hacia el sur a la región de Panfilia, a orillas del mar Mediterráneo. En esta región estaba la ciudad de Perge, en donde predicaron la palabra. De Perge se dirigieron a Atalia, una ciudad en la misma región de Panfilia donde estaba el puerto. En el puerto de Atalía se hicieron a la mar por el mar Mediterráneo y deben haber tocado tierra en Seleucia, el puerto más cercano a Antioquía de Siria, donde estaba la iglesia que les encomendó. A su regreso, Pablo y su equipo misionero no pasaron por Chipre, como lo hicieron a la ida. En cuarto lugar tenemos el informe de Pablo a la iglesia en Antioquía. Hechos 14:27-28 dice: Y habiendo llegado, y reunido a la iglesia, refirieron cuán grandes cosas había hecho Dios con ellos, y cómo había abierto la puerta de la fe a los gentiles. Y se quedaron allí mucho tiempo con los discípulos.
Habían pasado alrededor de dos años desde que Pablo, Bernabé y Juan Marcos salieron de Antioquía de Siria en lo que se llama el primer viaje misionero de Pablo. Juan Marcos desertó y se volvió a Jerusalén. Pablo y Bernabé estaban de regreso en Antioquía de Siria. Lo primero que hicieron al llegar fue presentarse ante la iglesia. Era la primera conferencia misionera en la historia del Cristianismo. Los creyentes en Antioquía de Siria deben haber estado muy expectantes por saber cuáles fueron los resultados del viaje misionero de Pablo y Bernabé. Cuando llegó el momento de dar el informe, Pablo y Bernabé tomaron la palabra y refirieron cuán grandes cosas había hecho Dios con ellos y cómo había abierto la puerta de la fe a los gentiles. Ahora bien, si Usted recuerda algunos detalles del primer viaje misionero, de seguro que estará de acuerdo que ciertamente el Señor hizo cosas muy grandes por medio de Pablo y sus compañeros, como la salvación del oficial romano Sergio Paulo en Chipre, como la salvación de muchos judíos y gentiles en Antioquía de Pisidia, como el milagro de sanidad en ese cojo de nacimiento en Listra y tantas otras cosas más, pero también hubo grandes obstáculos durante el primer viaje misionero. La oposición de ese falso profeta judío llamado Barjesús en Chipre, la oposición de los judíos en prácticamente todas las ciudades que visitaron, la deserción de Juan Marcos, el apedreamiento de Pablo en Listra y tantas otras cosas más, pero Pablo y Bernabé no hablaron nada de lo negativo. ¿Será que querían ocultar la verdad al no hacer referencia a lo negativo? De ninguna manera. Lo que pasa es que Pablo y Bernabé consideraban los obstáculos como oportunidades para ver el poder de Dios. Fue en los obstáculos en donde Dios se manifestó cuán grande y cuan poderoso es. Igual tiene que ser con Usted, amable oyente. No se desanime por los obstáculos. Mírelos simplemente como oportunidades que Dios le está dando para que Usted experimente el maravilloso poder de Dios. Lucas registra que Pablo y Bernabé se quedaron mucho tiempo con los discípulos en Antioquía de Siria. En nuestro próximo estudio bíblico veremos que pasó después. Que el Señor le bendiga.
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