“Demostrando Mi Influencia 2”

En cualquier etapa de la vida en la que te encuentres, lo que sea que estés pasando, cualquier desafío que haya en tu vida, no hay excusas. No dejes que nadie te menosprecie. No dejes que nadie use esas cosas como excusa. En cambio, sé un ejemplo en esto

Aquí están cinco cosas de las que me gustaría hablarte, pero antes permíteme contarte que estamos involucrados en una serie de sermones titulados “Legado: ser dueño de mi influencia”. Nos estamos enfocando en tres libros en el Nuevo Testamento llamados las Cartas Pastorales: 1 Timoteo, 2 Timoteo y Tito.

Bien, ahora para empezar este estudio vamos a 1 Timoteo capítulo 4 versículo 12, ahí Pablo está hablando con Timoteo y él le dice: «Ninguno tenga en poco tu juventud, sino sé ejemplo de los creyentes en palabra, conducta, amor, espíritu, fe y pureza.» Y es precisamente en base a este versículo que hoy quiero hablar. Cinco cosas importantes:

Número uno, sé ejemplo de los creyentes en palabra. Ahora, recuerda hablar sin tacha, para que nadie pueda hacerte caer. Aquí hay algunas preguntas de autoevaluación que me he estado haciendo a mí mismo y quiero compartirlas contigo: ¿Sueles quejarte por todo? ¿Eres un crítico por excelencia? Proverbios 12:18 dice «Hay hombres cuyas palabras son como golpes de espada; Mas la lengua de los sabios es medicina.» ¿Eres un chismoso? ¿Compartes cosas que no debes compartir? ¿Usas Facebook para averiguar la vida de los demás y tener temas de conversación con otros? Proverbios 16:28 dice: «El hombre perverso levanta contienda, Y el chismoso aparta a los mejores amigos» Ahora leamos Proverbios 20:19 «El que anda en chismes descubre el secreto; No te entremetas, pues, con el suelto de lengua.» Y ahora vamos a 2 Corintios capítulo 12 versículo 19, “¿Pensáis aún que nos disculpamos con vosotros? Delante de Dios en Cristo hablamos; y todo, muy amados, para vuestra edificación”

Mira, el chisme está ahí en la lista, junto con los celos, ataques de ira, ambición egoísta, arrogancia y calumnia. Esto lo podemos ver en el capítulo 1 de Romanos, justo en la lista con asesinos y aborrecedores de Dios, entonces dime ¿Hablas demasiado? Aquí hay un punto más con respecto al habla. ¿Usas lenguaje sucio? Efesios 5 dice esto: «Pero fornicación y toda inmundicia, o avaricia, ni aun se nombre entre vosotros, como conviene a santos; ni palabras deshonestas, ni necedades, ni truhanerías, que no convienen, sino antes bien acciones de gracias.» (Efesios 5: 3-4). Habla sin doble intenciones.

Número dos, sé ejemplo de los creyentes en conducta. ¿Te comportas bien en público? ¿Te comportas bien en la ruta a tu casa? ¿Te comportas bien cuando sales del estacionamiento?

Recuerdo que yo solía irritarme cuando conducía y solía usar la bocina de mi auto muy fuerte y muy seguido. Y luego me di cuenta de que les estaba tocando la bocina a algunos de mis hermanos en Cristo, entonces mis hijos me hicieron dejar de hacer eso. Entonces dime, ¿Te mantienes alejado de lugares tentadores y situaciones tentadoras? ¿Pagas tus cuentas a tiempo? ¿Eres honesto? ¿Tu palabra es tu garantía? El Salmo 15 hace la pregunta, “Jehová, ¿quién habitará en tu tabernáculo? ¿Quién morará en tu monte santo? El que anda en integridad y hace justicia, Y habla verdad en su corazón. El que no calumnia con su lengua, Ni hace mal a su prójimo, Ni admite reproche alguno contra su vecino. Aquel a cuyos ojos el vil es menospreciado, Pero honra a los que temen a Jehová. El que aun jurando en daño suyo, no por eso cambia» (Salmo 15: 1-4). ¿Estás contento con los regalos que Dios te ha dado? Mira 1 Timoteo capítulo 6 versículo 6, ahí Pablo dice: «Pero gran ganancia es la piedad acompañada de contentamiento; porque nada hemos traído a este mundo, y sin duda nada podremos sacar.» (1 Timoteo 6: 6-7)

«Así que, teniendo sustento y abrigo, estemos contentos con esto. Porque los que quieren enriquecerse caen en tentación y lazo, y en muchas codicias necias y dañosas, que hunden a los hombres en destrucción y perdición» (1 Timoteo 6: 8-9) El dinero es neutral, pero el amor al dinero, eso ya es diferente. Eso viene del corazón de una persona. «porque raíz de todos los males es el amor al dinero, el cual codiciando algunos, se extraviaron de la fe, y fueron traspasados de muchos dolores.» (1 Timoteo 6:8-10).

Entonces ¿Tienes amor por el dinero? ¿Estás persiguiendo el todopoderoso dólar? Si es así, déjame decirte que eso no es vivir sin reproches. Ahora, déjame hacerte la siguiente pregunta, ¿estás haciendo una inversión eterna? Cuando el CEO de Tyco, Dennis Kozlowski gastó $ 6,000 en una cortina de ducha para su departamento de Manhattan con dinero de la compañía, podemos decir que eso está mal, ¿verdad? Y cuando Merrill Lynch’s, John Thain gastó más de un millón de dólares en la redecoración de su oficina privada durante un período en el que las acciones de la compañía bajaban por las nubes, podemos decir que eso está mal ¿no es así? Cuando su basurero de pergamino costó $ 1,400, ese era un símbolo perfecto de desperdicio en exceso. Sin embargo, esos son punteros sencillos, ¿no? Pero si somos dueños de nuestra influencia, no podemos observarnos desde una distancia segura. Tenemos que mirar en nuestro corazón de cerca y debemos preguntarnos ¿Cómo estamos usando lo que Dios nos ha dado?

1 Timoteo 6: 17 y 18 dice: «A los ricos de este siglo manda que no sean altivos, ni pongan la esperanza en las riquezas, las cuales son inciertas, sino en el Dios vivo, que nos da todas las cosas en abundancia para que las disfrutemos. Que hagan bien, que sean ricos en buenas obras, dadivosos, generosos» «Manda», no es una sugerencia.

Pablo dice: asegúrate de mandarlos. Entonces, si te estás preguntando ¿por qué tenemos que hablar de dinero en la iglesia? Pues porque aquí mismo, en las Escrituras, Pablo le dice a Timoteo que les mande. «Ordénenlos Que hagan bien, que sean ricos en buenas obras, dadivosos, generosos; atesorando para sí buen fundamento para lo por venir, que echen mano de la vida eterna.» (1 Timoteo 6:18-19). «La vida que es verdaderamente vida». Entonces, ¿estás haciendo inversiones eternas con el dinero y con todo lo demás que Dios te ha dado?

Número 3, sé ejemplo de los creyentes en amor. ¿Demuestras amor a tu familia? ¿Provees para ellos? ¿Proporcionas para ellos no sólo: comida, ropa y refugio? 1 Timoteo 5: 8 dice que debemos estar haciendo eso, pero también debemos proporcionar presencia, ejemplo, consejo y sabiduría piadosa. Y tú ¿Muestras compasión a los necesitados? ¿Les muestras amor a tus vecinos? Pues mira, el amor se demuestra en actos de servicio.

Número 4, sé ejemplo de los creyentes en la fe. Fe sin reproche, sin excusas. Aquí, la palabra fe representa el contenido de la Escritura. El conocimiento de quién es Dios, quiénes somos nosotros y cómo Dios trabaja en nuestra vida. Y tú ¿Sabes lo que crees y por qué lo crees? No puedes vivir sin reproche si no sabes lo que Dios te llama a hacer. Tito 1: 9 dice: «Debes ser retenedor de la palabra fiel tal como ha sido enseñada, para que también pueda exhortar con sana enseñanza y convencer a los que contradicen»

Número 5, sé ejemplo de los creyentes en pureza. La pureza por encima del reproche. Pureza sin reproches. Ahora te pregunto: ¿te manejas apropiadamente con el sexo opuesto? ¿Eres coqueto con todas las personas con las que te rodeas? ¿Te manejas apropiadamente con el sexo opuesto? ¿Alguien encontraría una actitud incorrecta en tu página de Facebook o en el historial de tu correo electrónico? Mira, lo único que podemos tener es nuestra reputación.

Mira, cuando hablas de vivir para Cristo, todo lo que tienes es tu reputación y la gente puede aferrarse a eso, así que debemos tener valores estrictos y una política correcta de interacción con el sexo opuesto. No debes salir a comer con un miembro de tu sexo opuesto en soledad, a menos que sea tu esposa/o, tu madre o padre. Mira, si tú me vieras en un auto conduciendo con alguien que no es mi esposa, ¿qué pensarías? ¿Lo ves? Tienes que vivir sin reproche. No te pongas en una situación peligrosa, no trates de hacerte el fuerte, tú debes huir de la tentación, y no pienses ni por un momento que eso es tener miedo.

Mira, por mi forma de vivir, muchas personas me podrán llamar miedoso, pero la verdad es que, es mucho más importante lo que Dios piensa de mí, es por eso que debemos aprender a vivir sin reproches. Pero vivir por encima del reproche es difícil ¿verdad? Pues debo decirte que sí. La obediencia es difícil, pero puedo prometerte que no es más difícil que ser Dios y tomar la forma del hombre. No es más difícil que lo que vivió Isaías viviendo una vida de desprecio y rechazo. No es más difícil que ser acusado falsamente y sentenciado a crucifixión. No es más difícil que tener las manos atadas a un poste y la espalda azotada con correas de cuero con pequeños trozos de bolas de metal y rocas dentadas en el extremo, de modo que la espalda quede abierta, colgando de la carne. No es más difícil que ser puesto en una cruz y tener clavos clavados en tus manos y tus pies. No es más difícil que levantar esa cruz y caer en un agujero para que tus hombros se separen. Ahora, acabo de describir la parte más difícil de la crucifixión. Jesús en esa cruz tomó tus pecados y mis pecados. Él llevó nuestros pecados en Su cuerpo en la cruz. Él murió para que pudiéramos vivir hasta el punto de que el Padre tuvo que darle la espalda a su Hijo, porque Dios no puede mirar el pecado. No hay nada más difícil que eso. Seguimos a Uno que se ha entregado por completo por nosotros. Entonces ¿Estás dispuesto a hacer eso por Él?

 

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